A estas alturas de la película recalcar el origen pagano de casi todas las fiestas religiosas del mundo resulta superfluo. La Navidad de los cristianos, no es otra fiesta que la milenaria celebración del Solsticio de Invierno, en el que la Luz del Día comienza su lance victorioso anual sobre las Tinieblas de la Noche...
Pero ese origen pagano no desmerece para nada la celebración de la Navidad cristiana, la Hanukkak hebrea, o la de cualquier otra religión del mundo que gire alrededor del Solsticio de Invierno. Al contrario, quizá lo que nos deja traslucir es el origen humano de todas las religiones.
Creo que nadie debería ser obligado ni inducido a abandonar la religión de sus mayores ni a tener religión alguna. Creo que los días del DOMUND católico y las conversiones forzosas deberían ser proscritos para siempre. Como dice el teólogo católico Hans Küng la paz entre las religiones es imprescindible para alcanzar la paz entre las naciones; la paz entre las naciones es imprescindible para alcanzar la paz entre los hombres.
La Ética podría ayudar a ello. Hay unas normas éticas universales que están presentes en todas las religiones y en todos los seres humanos, creyentes y no creyentes. Normas muy sencillas y claras que pueden ayudar a la consecución de esa Paz Universal por encima de razas, credos y nacionalidades:
1. Todo ser humano tiene que ser tratado con humanidad.
2. No hagas a otro lo que no quieras que te hagan a ti.
3. No matarás.
4. No robarás.
5. No mentirás.
6. No usarás la sexualidad indebidamente.
A todos los hombres y mujeres del mundo de buena voluntad, a todos los amigos y lectores de Desde el trópico de Cáncer: ¡Felices Fiestas! ¡Feliz Navidad! ¡Feliz Solsticio!. Que la Paz sea con ustedes.
Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt
Entrada núm. 2206
Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt
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"La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura" (Voltaire)