El blog de HArendt - Pensar para comprender, comprender para actuar - Primera etapa: 2006-2008 # Segunda etapa: 2008-2020 # Tercera etapa: 2022-2025
jueves, 28 de noviembre de 2024
[ARCHIVO DEL BLOG] Solidaridad. Publicado el 22/07/2020
Del poema de cada día. Hoy, Las cometas, de José de Viera y Clavijo
LAS COMETAS
Anda cometa bella
toma de mi mano el vuelo
y vete subiendo al cielo
hasta parecer estrella,
extiende como centella
esa cola con que brillas
y corriendo largas millas
por los aires más ligeros
asusta a los gallineros,
y espanta a las aguilillas.
José de Viera y Clavijo (1731-1813)
poeta canario
miércoles, 27 de noviembre de 2024
De las entradas del blog de hoy miércoles, 27 de noviembre de 2024
Hola, buenos días de nuevo y feliz miércoles, 27 de noviembre de 2024. Kakistocracia (o caquistocracia, según la grafía que recomienda la Real Academia Española), se dice en la primera de las entradas del blog de hoy, viene del griego kàkistos, el peor, y kratos, gobierno; es decir, el gobierno de los peores; se trata de una deriva a la que tienden muchos gobiernos, también en nuestros lares, cuando el líder prima en la selección de sus colaboradores la lealtad sobre la competencia. La segunda es un archivo del blog de diciembre de 2017 en la que se traía a colación una cita de Dostoyevski, en su novela Los endemoniados, que decía así: ¿No podría ocurrir que la prosperidad le resultase antipática al hombre? ¿No podría ocurrir que prefiriese el sufrimiento y también que este le resultase tan provechoso como la prosperidad? Que el ser humano ama con pasión el sufrimiento es un hecho comprobado. La tercera es un poema de Zuri Negrín, titulado Pop, que comienza con estos versos: El balanceo del hundimiento es el eco de la pérdida/el orden nunca es permanente cuando escasea el equilibrio./Nada perdura en la inclinación de los ecosistemas/el mobiliario solo es un escenario de ficción. Y la cuarta, como siempre, son las viñetas de humor del día. Espero que todas ellas les resulten de interés. Y ahora, como decía Sócrates, nos vamos. Nos vemos de nuevo mañana si la diosa Fortuna lo permite. Sean felices, por favor, aun contra todo pronóstico. Tamaragua, amigos míos. HArendt
De tiempos difíciles para la democracia
Kakistocracia (o caquistocracia, según la grafía que recomienda la Real Academia Española) viene del griego kàkistos, el peor, y kratos, gobierno; es decir, el gobierno de los peores. Se trata de una deriva a la que tienden muchos gobiernos, también en nuestros lares, cuando el líder prima en la selección de sus colaboradores la lealtad sobre la competencia, escribe en La Vanguardia [Liderazgo y kakistocracia, 22/11/2024] el catedrático de Derecho Mercantil de Esade-URL, Miguel Trias.
Pero la galería de los monstruos en que se convertirá el gobierno de Estados Unidos a partir del 20 de enero aconseja que nos acostumbremos a su uso. No hablemos del comandante en jefe, pues poco cabe añadir a lo que todos conocemos. Centrémonos en la cuidadosa selección de los miembros de su gobierno, que supera las expectativas más tenebrosas. Como ministro de Sanidad elige al más inepto de los Kennedy, un conspiranoico antivacunas sin la más mínima noción del funcionamiento del sistema sanitario. El Departamento de Defensa ha sido encomendado a Pete Hegseth, un presentador de la Fox cuyo único mérito es ser veterano de guerra, pero sin experiencia pública ni conocimiento de la gestión militar. Y como fiscal general propuso a Matt Gaetz, un congresista acusado de tráfico sexual de menores, despreciado por sus propios compañeros de partido, que finalmente renunció ayer al nombramiento. Podríamos seguir, pero resultaría reiterativo.
A la lista hay que sumar al emprendedor más genial que ha producido el ecosistema norteamericano. Elon Musk ha sido designado para reducir el gasto público en dos billones (de doce ceros) de dólares. Es decir, un tercio del presupuesto federal. Podríamos esperar que alguien dotado de una capacidad tan desbordante para crear nuevos mundos empresariales esté habilitado para tan magna tarea. No será el caso, porque es sencillamente imposible y las habilidades empresariales no necesariamente son trasladables a la política. Además, es muy probable que, en pocos meses, su carácter egocéntrico entre en rumbo de colisión con el de su (actualmente) amado líder.
Solo con liderazgos sólidos será posible contrarrestar la ola de irracionalidad carismática que se abre. ¿Era esto lo que quería el pueblo norteamericano? Probablemente no. Pero votó a Trump con pleno conocimiento de causa, pues no paró de repetir en campaña lo que iba a hacer. ¿Por qué entonces el país más creativo e innovador de la Tierra es capaz de tomar el camino que decidió el pasado 5 de noviembre? Necesitamos tiempo para digerir la respuesta. Ha habido quien ha señalado como motivo el radicalismo woke que impregna el programa de los demócratas. Aunque desde luego no ayuda, no creo que se halle ahí la razón, sino en una combinación de ingenuidad, propia de un país que no ha sufrido nunca la opresión de la dictadura, y sobre todo de liderazgo.
Donald Trump, gracias a su estrategia falsaria de negar su derrota, pudo presentarse ante su electorado como un hombre fuerte que siempre gana. Esa imagen se afianzó en su debate con Biden y adquirió un aura mítica al salir ileso del atentado que sufrió en el mes de julio. En un momento en que las ideologías se fragmentan en mil batallas, el electorado busca un referente. Sucedió en Italia con otro empresario salvador como Silvio Berlusconi, por no hablar de los liderazgos carismáticos que infestaron Europa en la primera mitad del siglo XX.
En el lado demócrata, Biden fue capaz de movilizar en el 2020 a un electorado que había constatado adónde podían llegar las políticas supremacistas y se había aglutinado en torno al movimiento Black Lives Matter, al tiempo que pudo comprobar la inepcia de Trump en la gestión de la covid, y cosechó 81 millones de votos gracias a una movilización histórica. Inició su mandato con todas las cartas a su favor, pero enseguida, con la precipitada retirada de Afganistán, empezó a decepcionar. Y a pesar de que sus políticas fueron en general más atinadas que las de su predecesor, fue demostrando su falta de empatía y liderazgo. No obstante, en lugar de dar un paso atrás en el momento apropiado, tiró la toalla cuando no tuvo más remedio. Y aunque nos ilusionamos con la sonrisa de Kamala Harris, la suerte estaba echada.
Vienen tiempos difíciles para la democracia y, particularmente, para Europa. Solo con liderazgos sólidos, anclados en valores firmes, será posible contrarrestar la ola de irracionalidad carismática que se abre. La reacción llegará, pero entre tanto vamos a sufrir amplias dosis de kakistocracia global.
[ARCHIVO DEL BLOG] Contra la depresión nacional. Publicado el 24/12/2017
Del poema de cada día. Hoy, Pop, de Zuri Negrín (1984)
POP
El balanceo del hundimiento es el eco de la pérdida
el orden nunca es permanente cuando escasea el equilibrio.
Nada perdura en la inclinación de los ecosistemas
el mobiliario solo es un escenario de ficción.
Cuando lo novedoso se vuelve basura
es el tiempo el que vence.
Cuando nos saluda la muerte
es el tiempo el que vence.
Cuando ya nada
ni el espacio
ni la música
ni una mirada
puede escapar
a la oscuridad.
Zuri Negrín (1984)
poeta canario
martes, 26 de noviembre de 2024
De las entradas del blog de hoy martes, 26 de noviembre de 2024
Hola, buenos días de nuevo a todos y feliz martes, 26 de noviembre de 2024. Finalmente la sangre no ha llegado al río Senne, que cruza soterradamente la ciudad de Bruselas, se dice en primera de las entradas del blog de hoy, y la nueva Comisión propuesta por la presidenta Ursula von der Leyen será aprobada en su totalidad por el Parlamento Europeo, con Teresa Ribera en la vicepresidencia con mayor peso. En la segunda del día, un archivo del blog de agosto de 2015, el autor del blog se declaraba heredero del pensamiento de la Ilustración, monárquico y socialdemócrata, añadiendo a continuación que entendía la política como ejercicio virtuoso de la cosa pública, el federalismo como el marco idóneo en el que desenvolver el autogobierno de los pueblos y los Estados y la democracia como procedimiento y fin en sí misma. El poema de hoy, en la tercera, es del poeta Andrés Mirón y comienza con estos versos: Hay cosas que se explican cuando ya nada importa./Evoco los tranvías y a las rubias platino/del lábil cine negro y ciertos plenilunios. Y la cuarta, como siempre, son las viñetas de humor del día. Espero que todas ellas les resulten de interés. Y ahora, como decía Sócrates, nos vamos. Nos vemos de nuevo mañana si la diosa Fortuna lo permite. Sean felices, por favor, aun contra todo pronóstico. Tamaragua, amigos míos. HArendt
De como hacer el ridículo en Bruselas
Finalmente la sangre no ha llegado al río Senne, que cruza soterradamente la ciudad de Bruselas, dice en La Vanguardia [Cómo hacer el ridículo en Bruselas, 21/11/2024] su director adjunto Enric Juliana. La nueva Comisión propuesta por la presidenta Ursula von der Leyen será aprobada en su totalidad por el Parlamento Europeo, con Teresa Ribera en la vicepresidencia con mayor peso. El PP español tendrá que escoger en los próximos días entre la abstención y el voto en contra. Si vota en contra se verá en la obligación de expresar su rechazo a 14 comisarios pertenecientes al Partido Popular Europeo.
Se veía a venir y así lo apuntamos en La Vanguardia. La brega interna española no podía poner en crisis la puesta en marcha del nuevo gobierno europeo mientras Estados Unidos y el Reino Unido autorizan a Ucrania el lanzamiento de mísiles de largo alcance sobre suelo ruso, mientras Rusia revisa su doctrina de respuesta nuclear, mientras Donald Trump empieza a nombrar ministros, mientras Alemania, con la economía en crisis, se prepara para un decisivo adelanto electoral en febrero. Lo que no puede ser, no puede ser, y además es imposible. La locuaz eurodiputada Dolors Montserrat no estaba en condiciones de provocar una crisis política de alcance internacional, ni siquiera aconsejada por el sagaz Esteban González Pons .
“¡La hemos tumbado!”. “¡La hemos tumbado!” El martes de la semana pasada, Montserrat salió de la sala de audiencias del Parlamento Europeo, gritando que Ribera estaba políticamente muerta. Los periodistas allí presentes tomaron nota de esas exclamaciones.
El PP iba a muerte contra Ribera y parecía tener el apoyo de Manfred Weber, jefe de filas del Partido Popular Europeo y frustrado candidato a la presidencia de la Comisión en el 2019. Von der Leyen se inquietó. Pedro Sánchez, también. La futura Comisión Europa parecía estar herida de muerte. Si el PPE vetaba a la candidata española, los socialistas vetarían a los candidatos de Italia y Hungría. El pacto de julio parecía roto. El PP español estaba consiguiendo distraer la atención del drama de Valencia. Después de la multitudinaria manifestación de protesta del sábado 9 de noviembre en la ciudad de València, no vendría la dimisión de Carlos Mazón, sino la caída de Teresa Ribera, portaestandarte de las energías renovables en España. Una magnífica operación de distracción.
Sánchez habló del asunto con Von der Leyen y se avino a reconsiderar la oposición socialista a los candidatos húngaro e italiano, a los que la izquierda ponía objeciones, por pertenecer a fuerzas de ultraderecha que no forman parte del bloque de investidura de la presidenta (populares, socialdemócratas, liberales y verdes). La gesticulación del grupo socialista contra Raffaele Fitto, el candidato italiano, tenía puntos débiles. Italia es la tercera economía de la UE y el Partido Democrático italiano (centroizquierda) no quería ser acusado de “antinacional” en su país. El PD, reforzado en los últimos días con sendas victorias en las elecciones regionales de Emilia-Romagna y Umbria, no iba a votar en contra. La oposición más fuerte a Fitto estaba residenciada en los socialistas franceses. La pugnacidad entre Francia e Italia es creciente. Emmanuel Macron y Giorgia Meloni no se soportan.
Sánchez argumenta ahora que todos los gobiernos de la Unión tienen derecho a proponer sus candidatos a la Comisión Europea y que ello no significa aceptar su ideología. No decía lo mismo hace unas semanas. Quizá en algún momento de esta historia, Sánchez se imaginó que podía ser el Capitán Trueno que se enfrentaba a la extrema derecha en todos los planos imaginables.
Cuando la UE era más pequeña, los países grandes disponían de dos comisarios europeos, lo cual facilitaba los consensos nacionales: uno para el Gobierno y otro para la oposición. Esa norma armónica se rompió en el 2004 con la última ampliación del espacio comunitario. Muchas cosas se rompieron en España en el 2004. El 2004 habita en el 2024, lo estamos viendo constantemente.
No ha sido Sánchez el que ha frenado a Weber y ha dejado a Alberto Núñez Feijóo en la estacada. Hace una semana, la CDU alemana (partido conservador democristiano al que pertenece Von der Leyen) quiso discutir ese asunto con sus aliados bávaros de la CSU (partido conservador social-cristiano al que pertenece Weber). Bajo ningún concepto, la Comisión Europea podía entrar en crisis antes de las elecciones alemanas. Un enredo español no podía debilitar al gobierno europeo. Los conflictos locales no pueden escalar tan fácilmente en Bruselas.