viernes, 7 de marzo de 2025

De las viñetas de humor de hoy viernes, 7 de marzo de 2025

 











































jueves, 6 de marzo de 2025

De las entradas del blog de hoy jueves, 6 de marzo de 2025

 





Hola, buenos días de nuevo a todos y feliz jueves, 6 de marzo de 2025. Un buen espía sabe manipular a las personas, y no hay nadie en el mundo más susceptible de ser manipulado que un narcisista, se comenta en la primera de las entradas del blog de hoy. En la segunda, un archivo del blog de junio de 2017, se hablaba de las tres jornadas de guerra fría que sendos estadistas se habían dedicado, tras de las cuales, setenta años de relación comenzaban a desmoronarse: hoy es ya una realidad insoslayable. El poema del día, en la tercera, comienza con estos versos: Cuando de noche pienso en Alemania,/No desciende a mis párpados el sueño;/Mis ojos no se cierran, mas los mojan/Mis lágrimas de fuego. Y la cuarta y última, como siempre, son las viñetas de humor, pero ahora, como decía Sócrates, "Ιωμεν" (toca marchar); volveremos a vernos mañana si las Euménides y la diosa Fortuna lo permiten. Sean  felices, por favor. Tamaragua, amigos míos. HArendt











Del manual de narcisistas del KGB

 





Un buen espía sabe manipular a las personas, y no hay nadie en el mundo más susceptible de ser manipulado que un narcisista, comenta en El País [Manual de narcisistas del KGB, 03/03/2025] la escritora Marta Peirano.

Donald Trump es un estadista de altura que solo negocia con estadistas de su nivel. No son tantos. Benjamín Netanyahu, Narendra Modi, Xi Jinping, Mohamed Bin Salmán. Es corta la lista de hombres a los que puede llamar pares, todos generales del siglo XXI embarcados en un proyecto histórico de reordenación territorial. Pero solo uno de ellos ha puesto todos sus recursos para apoyar su campaña cuando nadie daba un céntimo por ella. Solo uno de ellos levantó una agencia de desinformación con cientos de trabajadores operando 24 horas al día para hundir a Hillary Clinton. Solo uno mandó a su agencia de inteligencia hackear los correos del jefe de campaña de Clinton y distribuirlos de la manera más inteligente posible para ayudarlo a ganar en 2016. Vladímir Putin es más que uno de sus pares. Es el único que le entiende y le respeta de verdad.

Zelenski, por otra parte, no es un hombre de Estado. No se viste como un hombre de Estado, no tiene jet privado, no convocó elecciones cuando le tocaba, el pasado marzo. Es más bien como una ONG que pide, pide, pide y no quiere dar nada a cambio. De hecho, ni siquiera tiene un Estado propiamente dicho, porque Ucrania solo existe desde 1991 y desde entonces ha tenido al menos dos gobiernos derrocados. Gran parte de su población sigue hablando ruso. Donetsk y Lugansk ni siquiera reconocen al Gobierno de Kiev. No es más que un cómico mediocre que ha disfrutado de la generosidad de EE UU durante tanto tiempo que ha olvidado su lugar.

Trump no puede rebajarse a discutir con personas que no están a su altura, menos cuando se muestran desagradecidos y están dispuestos a provocar la Tercera Guerra Mundial. Sería irresponsable. De hecho, Trump no necesita negociar con Zelenski. La mayor parte de las reservas de litio y tierras raras de Ucrania están bajo la ocupación rusa, en la región del Donbás y la península del mar Negro que Rusia recuperó en 2014. Qué sentido tiene negociar con un hombre así cuando el objeto de deseo ya no está en su poder. Si ha sido capaz de resolver con Netanyahu el problema de Gaza y juntos están a punto de convertir ese estercolero en la nueva Riviera, ¿qué le impide resolver el problema de Ucrania con Putin y transformarla en un nuevo manantial de recursos para EE UU? Putin solo pide quedarse con las regiones que ya tiene, lo que parece completamente razonable dado que son prorrusas y que, si hubiera elecciones, votarían por él. Y que no haya soldados estadounidenses en territorio ucranio. Putin sí que quiere acabar con la guerra y empezar una nueva era de respeto mutuo y cooperación.

De hecho, esa nueva era ya ha empezado. El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ha ordenado a su comando cibernético que detenga las operaciones ofensivas contra Rusia durante las negociaciones. Cosas como deshabilitar malware ruso en servidores de este país antes de que pueda ser utilizado contra infraestructuras estadounidenses y bloquear webs que distribuyen propaganda antiestadounidense o a gente como LockBit, el grupo de ransomware más prolífico del mundo, antes de que ataque a empresas como Boeing o secuestre los servidores del servicio postal. Los analistas de la Agencia de Ciberseguridad ya no deberán trabajar o informar sobre amenazas que provengan de Rusia, y nadie monitorizará las injerencias del Kremlin en ningún proceso electoral. Rusia ya no es una amenaza para EE UU. Donald tiene la palabra de Vladímir.










[ARCHIVO DEL BLOG] "'Ich bin ein Berliner". Publicado el 02/06/2017

 





Un simple paseo por Berlín te muestra los fuertes lazos de EEUU y Alemania, afirma en El Mundo ['Ich bin ein Berliner', 02/06/2017] la periodista Silvia Román, el cordón umbilical que les unió tras la Segunda Guerra Mundial, el amigo necesario al otro lado del Atlántico, la admiración por una y otra cultura: desde Checkpoint Charlie al Ayuntamiento de Schöneberg, desde cuyo balcón el presidente John F. Kennedy pronunció en 1963 su célebre frase "Ich bin ein Berliner" ("Yo soy un berlinés"). La canciller alemana, Angela Merkel, lo sabe mejor que nadie: creció en la RDA y pudo aprender inglés gracias a su madre, profesora de idiomas, que se lo enseñó en casa. Merkel no ha ocultado su admiración por el aliado americano. A Barack Obama le despidió con una cena íntima en el Hotel Adlon, junto a la Puerta de Brandemburgo. A Donald Trump, tras tres jornadas juntos en Bruselas y Sicilia, le ha dedicado palabras de guerra fría. Y Trump, a Merkel, agresividad en forma de tuit. El choque transatlántico es una realidad. Setenta años de relación se desmoronan. Soñemos con volver al espíritu Berliner.












Del poema de cada día. Hoy, Insomnio, de Heinrich Heine

 





INSOMNIO


Cuando de noche pienso en Alemania,

No desciende a mis párpados el sueño;

Mis ojos no se cierran, mas los mojan

Mis lágrimas de fuego.

El tiempo va pasando; ya doce años

Desde que vi a mi madre trascurrieron;

Con la ausencia se acrecen cada día

Mi pena y mis deseos.

Aumentan mis deseos y mis penas;

De extraño hechizo preso,

A todas horas en mi mente viene

La viejecita, que conserve el cielo.

La pobre vieja me idolatra tanto,

Que hasta en sus cartas veo

Cómo su mano tiembla, y cuál se agita

Su corazón de madre allá en su pecho.

No se escapa mi madre de mi mente;

Doce años trascurrieron,

Doce años de dolor huyeron tardos,

Después que la estreché contra mi pecho.

Será eterna Alemania,

Es país de robusto y sano cuerpo:

Con sus fuertes encinas, con sus tilos,

Siempre podré encontrar su amado suelo.

Si allí mi pobre madre no viviera,

No suspirara por volver mi pecho.

No morirá Alemania, mas mi madre

Puede volar al cielo.

¡Cuántos, después que abandoné mi patria,

Besó la muerte con su helado beso!

¡Sangre derrama triste

Mi pobre corazón cuando los cuento!

Y es preciso contarlos; con el número

Aumenta mi dolor, y que los muertos,

Fríos y tristes ruedan,

Creo ¡gran Dios! sobre mi herido pecho.

¡Dios de bondad! por mi balcón penetra

Del sol de Francia el resplandor sereno;

Mi esposa llega, y su sonrisa aleja

Mis patrios melancólicos recuerdos.



Heinrich Heine (1797-1856)

poeta alemán



















De las viñetas del blog de hoy jueves, 6 de marzo de 2025

 




































miércoles, 5 de marzo de 2025

De las entradas del blog de hoy miércoles, 5 de marzo de 2025

 





Hola, buenos días de nuevo a todos y feliz miércoles, 5 de marzo de 2025. Desde la filosofía, desde la poesía, desde la psicología o, sencillamente, desde que se levanta por las mañanas, se dice en la primera de las entradas del blog de hoy,el ser humano se plantea la cuestión del sentido de su vida. La segunda del día es un archivo del blog de febrero de 2020 que se planteaba el concepto de identidad; identidad que ha servido para construir supuestas teorías, que nada tienen que ver con ese fondo íntimo de la persona, fruto siempre de una educación en libertad. El poema del día, en la tercera, comienza con estos versos: Ya todo es flor: las rosas/aroman el camino./Y allí pasea el aire,/se estaciona la luz,/y roza mi mirada/la luz, la flor, el aire. Y la cuarta y última, como siempre, son las viñetas de humor, pero ahora, como decía Sócrates, "Ιωμεν" (toca marchar); volveremos a vernos mañana si las Euménides y la diosa Fortuna lo permiten. Sean  felices, por favor. Tamaragua, amigos míos. HArendt