Mostrando entradas con la etiqueta Ópera. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Ópera. Mostrar todas las entradas

miércoles, 8 de abril de 2020

[MIS MUSAS] Hoy, con Max Aub, Giuseppe Verdi y Pedro Pablo Rubens




Las Musas, de Thorsvalden


Decía Walt Whitman que la poesía es el instrumento por medio del cual la voces largamente mudas de los excluidos dejan caer el velo y son alcanzados por la luz; Gabriel Celaya, que era un arma cargada de futuro; Harold Bloom,  que si la poesía no podía sanar la violencia organizada de la sociedad, al menos podía realizar la tarea de sanar al yo; y George Steiner añadía que el canto y la música son simultáneamente, la más carnal y la más espiritual de las realidades porque aúnan alma y diafragma y pueden, desde sus primeras notas, sumir al oyente en la desolación o transportarlo hasta el éxtasis, ya que la voz que canta es capaz de destruir o de curar la psique con su cadencia. Por su parte, Johann Wolfgang von Goethe afirmaba que cada día un hombre debe oír un poco de música, leer una buena poesía, contemplar un cuadro hermoso y si es posible, decir algunas palabras sensatas, a fin de que los cuidados mundanos no puedan borrar el sentido de la belleza que Dios ha implantado en el alma humana. 

Subo hoy al blog al poeta Max Aub y su poema ¿Dónde estás, España?, al compositor Guiseppe Verdi y su aria O filgli... Ah, la paterna mano, de su ópera Macbeth,  y al pintor Pedro Pablo Rubens y su cuadro Las tres Gracias. Disfruten de ellos.






Max Aub



Max Aub (1903-1972), nace en París en el seno de una familia judía de origen germano-francés. En 1916 se traslada a vivir a España, a la ciudad de Valencia, donde se naturaliza español. En 1928 se afilia al PSOE e inicia una intensa labor literaria que incluye teatro, novela, poesía y guiones cinematográficos. Como diplomático de la República en París gestiona la ejecución y compra del "Guernica" de Picasso para la Exposición Universal de 1938. Exiliado en Francia al finalizar la guerra civil, por su origen judío es internado en el campo de concentración de Djelfa (Argelia), pero en 1942 consigue embarcar desde Casablanca a México, en cuyo país obtiene la doble nacionalidad española-mexicana y donde residirá hasta su muerte. Volvió temporalmente a España en 1969. Les dejo con su poema: "¿Dónde estás, España?", escrito durante su internamiento en Djelfa.


¿DÓNDE ESTÁS, ESPAÑA?


¿Dónde estás, España? Por el mundo abierta.
¿Dónde estás, España? Mía, desparramada.
¿Dónde estás, España? Monte, río, meseta.
¿Dónde estás, España? Tierra en tierras, alma.
¿Dónde estás, España? Viejísima meta.
¿Dónde estás, España? Cresta desierta.
¿Dónde estás, España? ¿Es tuya este hierba?
¿Dónde estás, España? ¿Seré yo el que sueño?
¿Dónde estás, España? ¿Es tuyo este suelo?
¿Dónde estás, España? Donde sea te veo.
¿Dónde estás, España? En llano, en montaña...
¿Dónde estás, España? Siempre, siempre, España.
Este llano, León. Esta aguanieve, Ávila.
Aquel alto, Burgos. Ese albor, Medina.
Este cielo jándalo y esta cal de Játiva.
Cante de Cádiz... Lejos, Algeciras.


***




Giuseppe Verdi



Giuseppe Verdi (1813-1901) fue un compositor romántico italiano de ópera del siglo XIX, el más notable e influyente compositor de ópera italiana y puente entre el bel canto de Rossini, Bellini y Donizetti y la corriente del verismo de Puccini. Fue autor de algunos de los títulos más populares del repertorio lírico, como los que componen su trilogía popular o romántica: Rigoletto, Il trovatore y La traviata y las obras maestras de la madurez como Don Carlos, Aida, Otello y Falstaff. 

Macbeth es una ópera en cuatro actos y diez cuadros con música de Giuseppe Verdi y libreto en italiano de Francesco Maria Piave y Andrea Maffei, estrenada en el Teatro della Pergola de Florencia el 14 de marzo de 1847. El libreto está basado en la tragedia homónima de William Shakespeare. Fue la décima ópera de Verdi y también la primera de las obras de Shakespeare que adaptó a la escena operística.

Desde este enlace pueden disfrutar de su aria O figli... Ah, la paterna mano, interpretada por el tenor Veriano Luchetti en el teatro La Scala, de Milán, en 1975.




Fotograma de una representación de Macbeth


***


Peter Paul Rubens (1577-1640) fue un pintor barroco de la escuela flamenca. Su estilo exuberante enfatiza el dinamismo, el color y la sensualidad. Sus principales influencias procedieron del arte de la Antigua Grecia, de la Antigua Roma y de la pintura renacentista, en especial de Leonardo da Vinci, de Miguel Ángel, del que admiraba su representación de la anatomía,​ y sobre todo de Tiziano, al que siempre consideró su maestro y del que afirmó «con él, la pintura ha encontrado su esencia». Fue el pintor favorito del rey Felipe IV de España, su principal cliente, que le encargó decenas de obras para decorar sus palacios y fue el mayor comprador en la almoneda de los bienes del artista que se realizó tras su fallecimiento. Como consecuencia de esto, la mayor colección de obras de Rubens se conserva hoy en el Museo del Prado, con unos noventa cuadros, la gran mayoría procedentes de la Colección Real.

Como en otros cuadros de tema mitológico, Rubens plantea su obra de modo muy distinto al de los artistas que le precedieron. Representa a las hijas de Zeus como tipo de belleza ideal aunque pueden corresponder a la belleza más sensual. Aglaya, Talia y Eufrósine no fueron para Rubens más que una excusa para pintar tres academias femeninas, reproducción de las exuberantes formas de sus habituales modelos. La composición respeta el modelo clásico que representa a las Gracias completamente desnudas y reunidas, pero cambia la relación entre las tres figuras que están conectadas entre sí a través de los brazos, el velo transparente que las cubre, y sus miradas, es decir, psicológicamente, dando así nueva unidad al grupo. La disposición de las Gracias forma un triángulo, estando la de en medio de espaldas, con la cabeza vuelta y apoyada en sus compañeras. A esto se une la esplendidez de un colorido cálido, brillante y luminoso con un fondo constituido por un pintoresco paisaje de una gran sutileza. En él pueden distinguirse pequeños animales pastando. Se dice que al menos una de las figuras es reproducción de la segunda mujer de Rubens, Helena Fourment, o incluso variaciones sobre el mismo rostro de su esposa. Otros creen reconocer las facciones de las dos esposas del pintor: Isabella Brant y la ya citada Helena Fourment.

Originalmente colgado en la propia casa de Rubens, este cuadro fue adquirido por el rey Felipe IV de España entre los bienes del pintor, subastados tras su fallecimiento el 30 de mayo de 1640, pasando a decorar una de las salas del Alcázar de Madrid, y en el siglo XIX al Museo del Prado, en Madrid.




Las tres Gracias, 1639. Óleo sobre tabla, 221 × 181 cm. Museo del Prado



La reproducción de artículos firmados en este blog no implica compartir su contenido. Sí, en todo caso, su  interés. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt





HArendt




Entrada núm. 5903
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

viernes, 13 de marzo de 2020

[MIS MUSAS] Hoy, con el poeta José María Quiroga Pla, el compositor Giuseppe Verdi y el pintor Angelo Bronzino




Las Musas, de Thorsvalden


Decía Walt Whitman que la poesía es el instrumento por medio del cual la voces largamente mudas de los excluidos dejan caer el velo y son alcanzados por la luz; Gabriel Celaya, que era un arma cargada de futuro; Harold Bloom,  que si la poesía no podía sanar la violencia organizada de la sociedad, al menos podía realizar la tarea de sanar al yo; y George Steiner añadía que el canto y la música son simultáneamente, la más carnal y la más espiritual de las realidades porque aúnan alma y diafragma y pueden, desde sus primeras notas, sumir al oyente en la desolación o transportarlo hasta el éxtasis, ya que la voz que canta es capaz de destruir o de curar la psique con su cadencia. Por su parte, Johann Wolfgang von Goethe afirmaba que cada día un hombre debe oír un poco de música, leer una buena poesía, contemplar un cuadro hermoso y si es posible, decir algunas palabras sensatas, a fin de que los cuidados mundanos no puedan borrar el sentido de la belleza que Dios ha implantado en el alma humana. 

Subo hoy al blog al poeta José María Quiroga Pla y su poema "Soñando voy, España...", al compositor Guiseppe Verdi y su aria "La donna e mobile" de la ópera Rigoletto, y al pintor Angelo Bronzino y su cuadro "El triunfo de Venus".



El poeta José María Quiroga Plá


José María Quiroga Pla (1902-1955) fue un poeta, ensayista, escritor, periodista y traductor, perteneciente a la Generación del 27. Sus inicios como poeta aparecen ligados al ultraísmo, colabora en numerosas revistas literarias y participa en el número extraordinario de la revista Litoral dedicado a Góngora. Amigo íntimo del también poeta Pedro Salinas, colaboró con él en la primera traducción al español de "En busca del tiempo perdido", de Marcel Proust. Ocupó diversos cargos al servicio de la República y al término de la guerra civil se exilia en Francia y más tarde en Suiza, donde muere. Fue secretario personal de Miguel de Unamuno, con una de cuyas hijas estuvo casado. Les dejo con su poema.


SOÑANDO VOY, ESPAÑA...

Soñando, España, voy con tus caminos
en mi vagar, al Sena paralelo;
soñando con tu claro y alto cielo,
con tierras de encinar, montes de pinos,

trigueros llanos, viñas y olivares;
que en pan, aceite y vino y campo, al viento
especies vivas de tu esencia, siento
írseme el bien de los perdidos lares.

Soñándolo y soñándote distraigo
del hoy de hieles y el mañana incierto
el corazón y el pensamiento míos;

de tu recuerdo en el regazo caigo,
y en él me empuja de esperanza a puerto
la dulce agua batida de tus ríos.








Giuseppe Verdi (1813-1901) fue un compositor romántico italiano de ópera del siglo XIX, el más notable e influyente compositor de ópera italiana y puente entre el bel canto de Rossini, Bellini y Donizetti y la corriente del verismo de Puccini. Fue autor de algunos de los títulos más populares del repertorio lírico, como los que componen su trilogía popular o romántica: Rigoletto, Il trovatore y La traviata y las obras maestras de la madurez como Don Carlos, Aida, Otello y Falstaff. 

Rigoletto es una ópera en tres actos con música de Giuseppe Verdi y libreto en italiano de Francesco Maria Piave, basado en la obra teatral Le roi s'amuse, de Víctor Hugo. Estrenada el 11 de marzo de 1851 en el teatro La Fenice de Venecia, forma junto con El trovador y La traviata (ambas de 1853), la trilogía popular operística que compuso Verdi a mediados de su carrera. Se trata de un drama de pasión, engaño, amor filial y venganza que tiene como protagonista a Rigoletto, el bufón jorobado de la corte del Ducado de Mantua.

Desde este enlace pueden disfrutar de su famosísima aria "La donna e mobile" interpretada en 1994 en la ópera de Los Ángeles por los tenores José Carreras, Plácido Domingo y Luciano Pavarotti. Disfrútenla.



Fotograma de una representación de Rigoletto


Angelo Bronzino, más conocido como Bronzino (1503-1572) fue un pintor italiano áulico, uno de los más destacados representantes del manierismo más refinado, maduro e intelectual. La mayor parte de sus pinturas son retratos de grandes literatos y de integrantes de la familia de los Médicis o de allegados a ésta, por ejemplo de la hermosa Leonor Álvarez de Toledo, hija del virrey de Nápoles y enlazada matrimonialmente con los Médicis. Los retratos, la mayoría en estilo cortesano, llevan un cuidado tratamiento de las vestimentas y joyas, con colores fríos.

Su "Alegoría del triunfo de Venus" fue realizada etre los años 1540 a 1550, en la corte del duque Cosme I de Médici. Tiene una dimensión de 146 x 116 cm y se exhibe en la National Gallery de Londres desde 1860. Es una composición manierista, por su artificialidad y oposición al naturalismo y a los principios de belleza clásica defendidos durante el Alto Renacimiento. En él se representa a Venus sosteniendo la manzana de la discordia en su mano izquierda, y girando su cabeza para dar un beso a Cupido. El tema central de la pintura es el erotismo o el amor prohibido, que acompañado por la envidia y los celos producen consecuencias trágicas.​



El triunfo de Venus, de Bronzino



La reproducción de artículos firmados en este blog no implica compartir su contenido. Sí, en todo caso, su  interés. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt





HArendt




Entrada núm. 5821
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

lunes, 17 de febrero de 2020

[MIS MUSAS] Hoy, con el poeta José Herrera Petere, el compositor Umberto Giordano y el pintor Giorgione







Decía Walt Whitman que la poesía es el instrumento por medio del cual la voces largamente mudas de los excluidos dejan caer el velo y son alcanzados por la luz; Gabriel Celaya, que era un arma cargada de futuro; Harold Bloom,  que si la poesía no podía sanar la violencia organizada de la sociedad, al menos podía realizar la tarea de sanar al yo; y George Steiner añadía que el canto y la música son simultáneamente, la más carnal y la más espiritual de las realidades porque aúnan alma y diafragma y pueden, desde sus primeras notas, sumir al oyente en la desolación o transportarlo hasta el éxtasis, ya que la voz que canta es capaz de destruir o de curar la psique con su cadencia. Por su parte, Johann Wolfgang von Goethe afirmaba que cada día un hombre debe oír un poco de música, leer una buena poesía, contemplar un cuadro hermoso y si es posible, decir algunas palabras sensatas, a fin de que los cuidados mundanos no puedan borrar el sentido de la belleza que Dios ha implantado en el alma humana. 

Subo hoy al blog al poeta José Herrera Petere y su poema El viaje secreto, al compositor Umberto Giordano y su aria Vicino a te, de la ópera Andrea Chérnier, y al pintor Giorgione y su cuadro Venus dormida.




El poeta José Herrera Petere


José Herrera Aguilera, más conocido como José Herrera Petere, (1909-1977) fue un escritor español de la generación del 36, hijo del general y Presidente de la II República en el exilio entre 1960 y 1962, Emilio Herrera Linares. Cultivó sobre todo la poesía, pero creó también en narrativa, cuentos infantiles y teatro. Fue autor de numerosos poemas y canciones de motivación y exaltación del bando republicano durante la Guerra Civil española.



EL VIAJE SECRETO

Quiero decirle al tren que no me espere
que tengo un río de luto a la cintura
y un tajamar de hielo en la garganta.

No, no me esperes tren que vas al campo,
al norte azul y al alto mediodía
que alegre lumbre y cerros vas cantando.

No, no me esperes, no, tren de la tarde
airoso tren de pinos,
que tengo el pecho herido y en la sangre
rojas culebras.

¡Oh tren de sol, no puedo ir contigo,
que árboles pasan como manos pálidas,
que unos rincones negros me sujetan
con sus lágrimas de humo entre los bosques
a negruras heladas,
que unas cavernas negras me ensordecen,
que unos árboles altos se agigantan,
que las cenizas y el dolor me esperan
en llanuras quemadas,
que hasta la noche trenes no han de oírse
-fervores y clamores en campos bajos-
que vayan hacia España!

¡Oh tren de noche llévame contigo
cargado de metales y de luces,
de corazón, de rocas y hierros,
a deterte solo en cumbres agrias!




El compositor Umberto Giordano


Umberto Giordano (1867-1948) fue un compositor italiano dedicado principalmente a la creación de óperas. Su obra más conocida es Andrea Chénier, ópera romántica de estilo verista compuesta a finales del siglo XIX.  

Andrea Chénier es un drama de ambiente histórico en cuatro actos con música de Umberto Giordano y libreto en italiano de Luigi Illica, basado libremente en la vida del poeta francés André Chénier (1762-1794), ejecutado durante la Revolución Francesa. Esta ópera verista fue estrenada en La Scala de Milán el 28 de marzo de 1896. Desde este enlace pueden disfrutar del video en el que la soprano Montserrat Caballé y el tenor José Carreras cantan en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona el dueto Vicino a te, de la ópera Andrea Chérnier.




El pintor Giorgione


Giorgio Barbarelli da Castelfranco, más conocido como Giorgione (1477/1510), fue un pintor italiano del Alto Renacimiento, representante destacado de la escuela veneciana, cuya carrera quedó interrumpida por su temprana muerte, con poco más de 30 años. Giorgione es conocido por la poética calidad de su trabajo, aunque solo seis cuadros se le atribuyen con certeza. 

La Venus dormida, también llamada Venus de Dresde, es una obra pintada con la técnica del óleo sobre lienzo, sumamente importante por la influencia que ejerció en la representación de la diosa Venus tendida, tema recurrente en el Renacimiento y Barroco (Tiziano, Rubens...). Se trata de una de las últimas creaciones de Giorgione, realizada hacia 1510. La pintura retrata a una joven mujer desnuda, cuyo perfil parece acompañar al paisaje que le sirve de trasfondo. Giorgione ha puesto mucha atención al pintar ese paisaje, lo cual se hace notar en los detalles y los sombreados, de este modo la obra posee una exquisitez y un puro ritmo de línea y contorno. La textura de las figuradas telas en donde yace tranquilamente la diosa y el armonioso, bucólico paisaje, dotan a este cuadro de un justo equilibrio entre la placidez y la sensualidad. Esta obra maestra del desnudo ha influido en muchos pintores posteriores a Giorgione, entre los cuales se destacan Tiziano (por ejemplo en la Venus de Urbino), Velázquez (Venus del espejo), Rubens, Ingres y Manet.





La reproducción de artículos firmados en este blog no implica compartir su contenido. Sí, en todo caso, su  interés. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt





HArendt




Entrada núm. 5743
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

miércoles, 22 de enero de 2020

[MIS MUSAS] Hoy, con el poeta Pedro Garfias, el compositor Giacomo Puccini y el pintor Antonio Correggio



La danza de las Musas en el Helicón, de Bertel Thorvaldsen (1819)



Decía Walt Whitman que la poesía es el instrumento por medio del cual la voces largamente mudas de los excluidos dejan caer el velo y son alcanzados por la luz; Gabriel Celaya, que era un arma cargada de futuro; Harold Bloom,  que si la poesía no podía sanar la violencia organizada de la sociedad, al menos podía realizar la tarea de sanar al yo; y George Steiner añadía que el canto y la música son simultáneamente, la más carnal y la más espiritual de las realidades porque aúnan alma y diafragma y pueden, desde sus primeras notas, sumir al oyente en la desolación o transportarlo hasta el éxtasis, ya que la voz que canta es capaz de destruir o de curar la psique con su cadencia. Por su parte, Johann Wolfgang von Goethe afirmaba que cada día un hombre debe oír un poco de música, leer una buena poesía, contemplar un cuadro hermoso y si es posible, decir algunas palabras sensatas, a fin de que los cuidados mundanos no puedan borrar el sentido de la belleza que Dios ha implantado en el alma humana. 

Subo hoy al blog al poeta Pedro Garfias y su poema Primavera en Eaton Hastings, al compositor Giacomo Puccini y su aria Vogliatemi bene, de la ópera Madama Butterfly (que pueden ver en este vídeo, interpretada por la soprano Angela Gheorghiu y el tenor Jonas Kaufmann el año 2007, en Roma), y al pintor Correggio y su cuadro Venus y Amor descubiertos por un sátiro.




El poeta Pedro Garfias


Pedro Garfias (1901-1967) fue un poeta vanguardista de la Generación del 27. A los 17 años se traslada a Madrid para estudiar Derecho, estudios que no concluye. Impulsor del ultraísmo, se opone al modernismo que domina la lírica española de ese tiempo. Funda las revistas de poesía Horizonte y Tableros, y ejerce como periodista. En 1921 frecuenta la Residencia de Estudiantes de Madrid. Sus primeros libros de poemas reciben elogiosas críticas de revistas como Gaceta Literaria, Revista de Occidente y Mediodía. En 1927 participa en el famoso homenaje que los poetas español rinden a Góngora en Sevilla. Al advenimiento de la República se afilia al partido comunista colaborando en sus revistas Línea y Octubre. En la guerra civil participa activamente como comisario político en varias unidades de combate del PCE. Al finalizar la guerra civil viaja a Francia y Gran Bretaña, y en 1940 a México, donde reside hasta su muerte. Les dejo con su poema 



"PRIMAVERA EN EATON HASTING"

Hoy que llevo mis campos en mis ojos
y me basta mirar para verlos crecer
siento vuestra llamada, prados de verde edad,
oigo vuestras palabras, árboles de cien años,
y os busco inútilmente a través de la tarde.
Ni el vuelo de los trinos ni el canto de las ramas
han de romper el duro silencio de mi boca.
Si me quedase inmóvil, como esta buena encina,
vendrían vuestros pájaros a anidar en mi frente,
vendrían vuestras aguas a morder mis raíces
y aun seguiría viendo con su blancura intacta,
quien sabe si dormida, la España que he perdido.




El compositor Giacomo Puccini



Giacomo Puccini (1858-1924) fue un compositor italiano visionario. Para él, el uso de pasajes modales o recursos politonales y la tonalidad o la atonalidad eran cuestiones de efecto que estaban definidas por las necesidades dramáticas de la obra. Fue uno de los pocos compositores de ópera capaces de usar brillantemente las técnicas operísticas alemana e italiana. Se le considera el sucesor de Giuseppe Verdi. Algunas de sus melodías, como "O mio babbino caro" de Gianni Schicchi, "Che gelida manina" de La bohème y "Nessun dorma" de Turandot, forman parte hoy día de la cultura popular.

Madama Butterfly es una ópera en tres acto con música de Giacomo Puccini y libreto en italiano de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica. Puccini basó su ópera en parte en el cuento "Madame Butterfly" (1898) de John Luther Long, que fue dramatizado por David Belasco. Puccini también se basó en la novela Madame Chrysanthème (1887) de Pierre Loti. Según un estudioso, la ópera se basó en acontecimientos que realmente ocurrieron en Nagasaki a principios de los años 1890.




Antonio Correggio (1489-1534), fue un pintor italiano del Renacimiento, dentro de la escuela de Parma que se desarrolló en la corte de los Farnesio durante el apogeo del Manierismo en Italia. Los datos conocidos de su vida son escasos. Empezó a pintar en Mantua, donde trabajaba Andrea Mantegna, que fue su principal influencia de juventud. Fue influido también por Lorenzo Costa el Viejo y Leonardo da Vinci. Estuvo en Roma entre 1517 y 1520, época en la que adquirió un clasicismo naturalista al contacto con Rafael y Miguel Ángel. Su gran admiración por el primero ha hecho que se le atribuya la frase (seguramente apócrifa) de Anch'io sono pittore! (¡También yo soy pintor!)



Venus y Amor descubiertos por un sátiro, 1525 
Museo del Louvre, París



La reproducción de artículos firmados en este blog no implica compartir su contenido. Sí, en todo caso, su  interés. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt




HArendt




Entrada núm. 5661
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

lunes, 16 de septiembre de 2019

[MIS MUSAS] Hoy, con Leopoldo Panero, Tintoretto y Giacomo Puccini





Decía Walt Whitman que la poesía es el instrumento por medio del cual la voces largamente mudas de los excluidos dejan caer el velo y son alcanzados por la luz; Gabriel Celaya, que era un arma cargada de futuro; Harold Bloom,  que si la poesía no podía sanar la violencia organizada de la sociedad, al menos podía realizar la tarea de sanar al yo; y George Steiner añadía que el canto y la música son simultáneamente, la más carnal y la más espiritual de las realidades porque aúnan alma y diafragma y pueden, desde sus primeras notas, sumir al oyente en la desolación o transportarlo hasta el éxtasis, ya que la voz que canta es capaz de destruir o de curar la psique con su cadencia. Por su parte, Johann Wolfgang von Goethe afirmaba que cada día un hombre debe oír un poco de música, leer una buena poesía, contemplar un cuadro hermoso y si es posible, decir algunas palabras sensatas, a fin de que los cuidados mundanos no puedan borrar el sentido de la belleza que Dios ha implantado en el alma humana. 

Subo hoy al blog al poeta Leopoldo Panero y su poema "España hasta los huesos"al pintor Tintoretto y su cuadro "Susana y los viejos", al compositor Giacomo Puccini y su dueto "O dolci mani", de la ópera "Tosca", cantado por el tenor Placido Domingo y la soprano Raina Kabaivanska , que pueden ver en vídeo desde este enlace.



***



Leopoldo Panero


Leopoldo Panero (1909-1962). Poeta, hermano de poeta y padre de poetas. Nació en Astorga (León). Estudió Derecho en las Universidades de Valladolid y Complutense de Madrid. Durante la guerra civil fue encancerlado por sedición, pero la acusación no prosperó por la intercesión de Unamuno y de la propia esposa de Franco. Afiliado a Falange, fue agregado cultural de la embajada de España en Londres (1945-1947) donde conoció a Luis Cernuda, En 1950 obtuvo el Premio Nacional de Literatura. Les dejo con su poema. 



ESPAÑA HASTA LOS HUESOS
por 
Leopoldo Panero




La canción
que nunca diré,
se ha dormido en mis labios.
La canción,
que nunca diré.

F.G.L.

Tu dulce maestría sin origen 
enseñas, Federico García Lorca;
la luz, la fresca luz de tus palabras,
tan heridas de sombra.

Tu empezado granar, tu voz intacta
tu sed desparramada hacia las cosas,
tu oración hacia España, transparente
de verdad, como loca.

Tu intimidad de sangre como un toro;
tu desvelada esencia misteriosa
como un dios; tu abundancia de rocío;
la ebriedad de tu copa.

Por la anchura de España, piedra y sueño,
secano de olivar, rumor de fronda,
cruzó la muerte y te arrimó a su entraña
de fuente generosa.

... De valle en valle su cansancio tienden
viejos puentes que el cielo desmorona,
sosiego denso del azul manando,
resol de loma en loma.

Las bravas sierras; los sedientos cauces;
el alear de España a la redonda;
granito gris entre encinares pardos,
bajo la luna absorta.

Ligeros jaramagos amarillos,
movidos por el aire, la coronan
de paz, mientras sacude sus entrañas
seco aullido de loba.

... Noticias han venido de las torres
del Genil y del Darro y una ignota
dulzura se apodera de mi pecho
como en viviente forma.

Así desde la Alhambra caen las aguas,
el sonido de un árbol que se corta,
el rumor de los pájaros ocultos,
al empezar la aurora.

Hacia dentro la música deslumbra, 
como un abrazo, mi tristeza, en ondas
de amor que por el alma se dilatan, 
y mis palabras rozan.

Temblor de ti mi pensamiento tiene
mientras fluye en mi verso gota a gota,
la sorpresa, el dolor de recordarte
trágicamente ahora.

Noticias han venido de los árboles
cortados por el hacha sigilosa,
y han venido rumores de la hierba,
y del bordón, la nota.

Cantaste lo dormido de tu raza;
la nieve insomne de tu infancia toda:
la historia que es amor, y hasta los huesos
España, España sola.

El dolor español de haber nacido;
la pena convencida y española
de abrir los ojos a la seca brisa
que cruje en la memoria.

Cantaste la ribera apasionada,
la santa piel de fiera que se agosta,
el yermo de ansiedad, la tribu íbera
que hace del pan limosna.

Tú eras como una mano con rocío
llena de amor, de plenitud, de sobra;
de simiente de España; de hermosura
que en el surco se arroja.

Tú eras la lengua alada del espíritu
y el gozo vegetal; la fe que ahonda
su primera raíz en la mañana
adánica, en la obra

tierna de Dios, reciente todavía,
acabada en pecado, en carne fosca
de pecado, en tristeza que se oculta,
desamparada, en otra.

En tu rincón de sed y de preguntas
hacia Dios te levantas en persona
desde la noble mansedumbre lenta
que la tierra atesora.

Te levantas; te pones en Sus manos;
te acuerdas en Sus ojos; te perdonas
en Su mirada para siempre, tiemblas
en Su amor; muerto, lloras.

Del beso abandonado, de la risa,
solo conservas la tristeza atónita,
el impulso de amor que te llevaba
como el viento a las hojas.

Cantaste la locura genesíaca,
el brio del dolor, la gente honda
donde suena la muerte y bebe el hombre
quietud de la amapola.

Tu verso es chorro puro de agua virgen,
sagrada juventud que no se agota;
frescor de un dios perenne en la ceniza,
tu afán mortal reposa.

Buscaste en las palabras lo imposible:
su hueso de fantasma, su sonora
cuerda interior de agua, su silencio:
la verdad que no nombran.

De ramos que se olvidan; de sonrisas
con humedad antigua en la corola;
de nombres en insomnio para siempre,
la realidad se colma.

Huele tu verso a madreselva fresca, 
a ruiseñor en vuelo, a luz remota,
a musgo de guitarra, a sufrimiento
de azogue que se borra.

Canta tu verso en el sonar del trigo,
como al reír el corazón se agolpa;
y su aroma desprenden las violetas
si tú las interrogas.

Hablas tras un temblor, como los niños,
como la piel delagua, como doblan
su cansancio los juncos por la tarde,
de la corriente en contra.

Hablas, hablas, relumbras en tu dicha,
como el astro desnudo que se moja
de pura inmensidad en las regiones
de azul ternura cósmica.

Hablas de la vejez que hay en el agua;
en las flores y el hombre; en lo que importa
más de verdad al pensamiento vivo
beber, puesta la boca

en el profundo manantial del alma,
en la bullente claridad incógnita
de lo que está en nosotros olvidado
de su origen y gloria.

Allí, temblando hacia el amor caído,
hacia la gran raigambre silenciosa
del instinto, hacia el árbol de la ciencia,
remejido en zozobra

de humana sed, el hálito bebiste
de Dios, el orden puro, la armoniosa
delicia, la unidad sin la materia,
dulce también otrora.

Asú cuando en la gracia del verano
florece ensimismada la magnolia,
voluptuosamente su fragancia
los sentidos transporta.

Y así en tu corazón está sonando, 
sonando está la soledad hermosa
de España: el agua, las tendidas mieses
que el sol eterno dora.

Voluntad dionisíaca, amor continuo,
montana de dolor, edad de roca;
de olivo prieto el corazón juntando
su reciedumbre añosa.

Como el humo cruel del sacrificio
arde en Dios tu recuerdo, y cuanto toca
ensombrece de angustia sobre España,
y en tu rescoldo sopla.

... Tú eras nieve en el viento, nieve negra,
nieve dormidamente poderosa,
nieve que cae en remolino triste,
como sobre una fosa.

Cantaste la tristeza inexorable,
la muerte que cornea a todas horas,
la vasta estepa donde el hombre ibero
desdén y fuerza toma.

Un poco de rocío entre las manos
queda solo de ti, como en la órbita
de la estrella el deleite, mientras suena
muerta la tierra sorda.

Del tiempo, al despertar, no recordabas
más que un vago perfume sin escoria;
un tremendo latido de esqueleto
que se seca en la horca.

Viviste hundido en la hermandad del mundo,
en el fluir del agua que no torna, 
en la terrible primavera viva,
como una amarga esponja.

Tu abundancia vital esconde dentro
zumo apretado de granado roja,
y sabor en los labios de una fiebre
secreta y melancólica.

Viviste en la alegría de ti mismo
y la espina sentiste de tu propia
soledad, la más íntima ternura,
la ausencia más recóndita.

Golpeado de penumbra, golpeado
levemente por alas de paloma,
contaste la nostalgia de Granada
cuando el sol la abandona.

Cantaste de ignorancia estremecido,
trémulo el corazón de mariposas, 
salobre el pensamiento, y la palabra
como un inmenso aroma.

En la humedad celeste de tus huesos
la pasión de la tierra cruje rota,
y la vejez de tu hermosura viva
desde Dios se incorpora.

Secreto en la ebriedad de tu deseo,
hundido en el azul como la alondra,
cantastes en el amor que perpetúa
lo que la edad deshoja.

Tu canción se levanta de la muerte;
tu voz está en el agua y en rosa;
tu sustancia en el son de la madera,
y en el viento de tu historia.

Eternamente de la España ida,
que el alma sabe cuanto más la ignora,
de la España mejor nos trae tu canto
sal de Dios en la ola.

Tu dulce maestría sin origen
enseñas, Federico García Lorca;
la luz, la fresca luz de tus palabras,
tan heridas de sombra...


***




Susana y los viejos, 1555-56. Museo de Historia del Arte, Viena



"Susana y los viejos" es uno de los cuadros más conocidos del pintor Italiano Tintoretto. Está realizado en óleo sobre lienzo. Mide 147 cm de alto y 194 cm de ancho. Fue pintado en 1560-15651​ y se encuentra actualmente en el Kunsthistorisches de Viena, Austria.

La obra representa a Susana, cuya historia es narrada en la versión griega del Libro de Daniel, capítulo 13. La historia de Susana es la de una joven «muy bella y temerosa de Dios», esposa del rico Joaquín, a quienes dos viejos espían en el baño. La intentan obligar a tener relaciones sexuales con ellos, diciéndole que, si no accede, dirán que se ha quedado sola, sin sus doncellas, para estar con un joven. Susana no cede a sus amenazas. Entonces los viejos la acusan de adulterio y consiguen que se la condene a muerte. Interviene entonces el profeta Daniel quien, interrogando a los ancianos, acaba probando la falsedad de la imputación, con lo que Susana se salvó y los ancianos fueron ejecutados.

A diferencia de las tendencias moralizantes, Tintoretto eligió representar no el momento dramático en el que los dos viejos se manifiestan abiertamente ante Susana, ni tampoco el castigo de los viejos lascivos sino otro, aún sereno, de la protagonista que se mira en un espejo en el interior de un jardín idílico, concentrándose así en el contenido erótico de la escena.

Aunque ocupe la mitad derecha del cuadro, el personaje de Susana es el centro de atención, con una blancura deslumbrante bañada de luz. Es una joven de encantos en plena madurez, desnudo femenino intermedio entre Miguel Ángel y Rubens.

A la izquierda, hay un seto de rosas, a cuyos extremos se encuentran los viejos. Entre Susana y ese seto aparecen toda una serie de objetos y joyas que parecen un bodegón por sí mismos, entre ellos el espejo en el que Susana se mira, el paño de seda blanco para secarse y un frasco de perfume de porcelana, con llamativos brillos.3​

La composición lleva la mirada, a través de las perspectivas de líneas de fuga, hacia el fondo del cuadro, al estanque con sus reflejos en el agua y el parque más allá.

El pintor veneciano pintó otros cuatro sujetos análogos, conservados en el Louvre de París, en el Museo del Prado de Madrid, en la Galería Nacional de Arte de Washington y en una colección privada no identificada.


***




Tosca es una ópera en tres actos, con música de Giacomo Puccini y libreto en italiano de Luigi Illica y Giuseppe Giacosa. Fue estrenada en Roma, el 14 de enero de 1900, en el Teatro Costanzi. El texto de la obra está basado en un drama, La Tosca, de Victorien Sardou, presentado en París en 1887, donde actuaba la gran actriz Sarah Bernhardt. Puccini pidió inmediatamente a su editor, Giulio Ricordi, que adquiriera los derechos sobre la obra, pero estos fueron vendidos al compositor Alberto Franchetti en 1893. Illica comenzó inmediatamente con la escritura del libreto. También Giuseppe Verdi quedó fascinado con la obra, pero no quiso componer una ópera ya que no era de su agrado el desenlace de la obra.

Tosca es considerada una de las óperas más representativas del repertorio verista italiano, por su intensidad dramática y por contener algunas de las arias más bellas del repertorio. El argumento combina amor, intriga, violencia, pasión y muerte. Junto a Madama Butterfly y La bohème, integra el trío de óperas más conocidas de Puccini.

Musicalmente, la obra se mantiene en el estilo desarrollado por Puccini hasta el momento: continuidad del discurso musical, roto apenas por una o dos arias. Las escenas más impactantes son el Te Deum del final del primer acto, y las arias Vissi d'arte (para Tosca) y E lucevan le stelle (para Mario). Dramáticamente, el segundo acto es de una intensidad inigualada por otra obra de Puccini. La acción transcurre en Roma, el 14 de junio de 1800, cuando Napoleón vence a los austríacos al mando del general Michael von Melas en la batalla de Marengo.



Giacomo Puccini


***


La reproducción de artículos firmados en este blog no implica compartir su contenido. Sí, en todo caso, su  interés. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt






HArendt




Entrada núm. 5259
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)