viernes, 25 de marzo de 2016

[Pensamiento] Política y democracia para el siglo XXI







Concluyo con esta entrada mi reseña de La política en tiempos de indignación (Galaxia Gutenberg, Barcelona, 2015), del profesor Daniel Innerarity, que me ha ocupado estas últimas semanas. Remito a lo dicho en entradas anteriores para una mejor comprensión de la misma.

Dice Innerarity (página 236), que según las encuestas la política se ha convertido en uno de nuestros principales problemas, y se pregunta si en esa opinión se expresa una nostalgia por la política desaparecida, una crítica ante la mediocridad de la actual, o más bien un desprecio antipolítico hacia algo cuya lógica no se acaba de entender. En cualquier caso, añade, los ciudadanos tendríamos más autoridad con nuestras críticas si pusiéramos el mismo empeño en formarnos y comprometernos. Y tal vez entonces, sigue diciendo, caeríamos en la cuenta de que nos encontramos en la paradoja de que nadie confía a la política lo que solo la política podría resolver.

Inmediatamente antes (página 233) ha aclarado que la democracia no es la presencia de los ciudadanos en los lugares donde se toman las decisiones, sino más bien el hecho de que las instituciones electivas y los electos puedan ser juzgados por la ciudadanía. Y en una opinión que comparto plenamente añade que, aunque suene paradójico, no hay otro sistema mejor que la democracia indirecta para proteger a la democracia frente a la ciudadanía, contra su inmadurez, debilidad, incertidumbre e impaciencia.

Al final del libro (páginas 348-350), en el capítulo titulado "La política como actividad inteligente", añade que la cuestión de como configurar democracias inteligentes, una inteligencia en red o una smart governance es un asunto crucial de nuestros días que algunos han formulado como la idea de una wiki-government. En cualquier caso, sigue diciendo, hay que volver a diseñar las instituciones de gobierno en la era de las redes. La gobernanza efectiva en el siglo XXI, dice, requiere colaboración organizada. Se trataría, sigue diciendo, de transformar las jerarquías en ecosistemas de conocimiento colaborativo y cambiar así, radicalmente, la cultura de gobierno desde un saber experto centralizado a otro en cuyo diseño la revisabilidad ocupe un lugar central. Los aprendizajes en política, dice, requieren procesos de reflexión en los que se observen las consecuencias de los cambios introducidos, los posibles efectos no deseados y se elabora una evaluación compartida de las políticas públicas.

El intenso debate que ha tenido lugar en los últimos años en torno a las posibilidades de transformar "deliberativamente" la democracia, sigue diciendo, se inscriben en ese concepto. Las sociedades aprenden a través de procesos de inteligencia colectiva, añade. Entre esas "comunidades epistémicas", dice, destacan los procedimientos de deliberación política a través de los cuales se combate colectivamente la perplejidad y se forma el juicio cívico. Si tiene sentido ese esfuerzo común, continúa diciendo, es porque la ignorancia a la que ha de hacer frente la política es descomunal. La inteligencia es algo que solo se ejerce compartidamente, añade. Una sociedad madura, dice, ensaya procedimientos, ámbitos e instituciones para experimentar acerca de sí misma, para dotarse de espacios de reflexión y deliberación. Y eso es algo, dice, que solo puede hacerse comunicativamente porque -no lo olvidemos- comunicar es lo que se hace cuando se ignora y se quiere superar esa ignorancia. Lo demás, añade, son rituales de notificación.

La idea de una democracia deliberativa, continúa, subraya la centralidad de los procesos y las instituciones para formar una voluntad común frente a un modelo de democracia entendida como meras negociación de opiniones y preferencias ya establecidas. La esfera pública, dice, es un espacio donde podemos convencer y ser convencidos [la misma opinión que mantenía sobre la política Hannah Arendt], o madurar juntos nuevas opiniones. Los debates sirven precisamente, continúa diciendo, para generar una información adicional que puede confirmar pero también modificar nuestros puntos de partida. En el modelo "republicano" de esfera pública lo que está en un primer plano no son los intereses de los sujetos ya dados de una vez por todas o visiones del mundo irremediablemente incompatibles, sino procesos comunicativos que contribuyen a formar y transformar las opiniones, intereses e identidades de los ciudadanos. El fin de tales procesos, añade, no es satisfacer intereses particulares o asegurar la coexistencia de diferentes concepciones del mundo, sino elaborar colectivamente interpretaciones comunes de la convivencia. Los procesos son decisivos, dice, ya que los intereses y las preferencias de los ciudadanos no están predeterminados ni constituyen, por lo general, un todo coherente. Con mucha frecuencia, añade, los actores no saben con exactitud lo que quieren ni en qué consiste su interés más auténtico. En otras palabras, dice, es el proceso democrático el que permite que los participantes se aclaren respecto de sí mismos y se formen una opinión acerca de aquello que está en juego. La fuerza política de la deliberación, concluye, se acredita precisamente en su capacidad de institucionalizar el descubrimiento colectivo de los intereses.

En el último párrafo de su libro el profesor Innerarity recuerda que comenzó diciendo que la principal perspectiva social y política que tenemos actualmente, nuestro principal desafío, es, a su juicio, desarrollar una política inteligente y reflexiva, situar a la política a la altura de las exigencias que plantea una sociedad del conocimiento. Ahora bien, se pregunta para concluir, ¿se puede pensar en medio de la política? De entrada, añade, no parece esa una actitud propia de la mayor parte de los actores políticos, dominados por una agitación superficial y especialmente sometidos a la dictadura de lo inmediato. Pero en el fondo, sigue diciendo, todos sabemos que con el activismo no se combate la perplejidad, solo se disimula. Nunca vamos tan rápido como cuando no sabemos adonde vamos. Por eso, añade, una de las tareas de todas crítica política es desenmascarar esa falsa movilidad, aquellas formas de pseudoactividad cuya aceleración y firmeza se deben precisamente a que no se tiene ni idea de lo que pasa. Puede que en otras épocas, termina diciendo, pensar fuera una pérdida de tiempo; en la nuestra, dice, cuando no podemos contar con la estabilidad de marcos y conceptos, ni confiar cómodamente en las prácticas acreditadas, pensar es un ahorro de tiempo, un modo radical de actuar sobre la realidad. 

De nuevo Hannah Arendt, a quien citaba al comienzo de su libro, sacada a relucir: comprender es pensar... Espero que les haya resultado interesante.



Daniel Innerarity


Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt





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La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

[Celebrando a Miguel de Cervantes] Hoy, "La señora Cornelia"






El próximo 23 de abril se conmemora el 400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes y de William Shakespeare. Como bien decía el editorial de El País del pasado 30 de enero, las comparaciones son odiosas, pero a veces pueden servir para valorar cómo distintos países gestionan desafíos parecidos. Tanto Miguel de Cervantes como William Shakespeare parece que murieron ese mismo día del año 1616, y tanto uno como otro son los mayores referentes de la lengua española y de la inglesa, respectivamente.  

A principios de año el primer ministro de Reino Unido, David Cameron, lanzaba al mundo un rotundo mensaje, que Shakespeare sigue vivo, y poco a poco se ha empezado a concretar la ofensiva internacional de propuestas con las que se pretende proyectar la obra del clásico en 141 países. En cuanto a Miguel de Cervantes, solo existe la vaga afirmación de que están en marcha 131 proyectos —académicos, culturales, turísticos, educativos—. No tiene sentido -sigue diciendo el editorial citado- medir la envergadura de los clásicos por la magnitud de los fastos que se programan para celebrar sus centenarios. Lo que importa es que sean leídos y representados y que su obra siga hablando en el presente. En ese sentido, El Quijote ha contado con prestigiosos valedores que lo llevan mimando desde que en 2005 se celebrara el cuarto centenario de la aparición de su primera parte. El año pasado, que recordaba el aniversario de la publicación de la segunda, hubo excelentes iniciativas que ayudaron a confirmar su grandeza. Pero fueron hechos puntuales, fruto muchas veces de la sociedad, a falta de un verdadero plan riguroso y bien articulado que cumpla con las expectativas que deben exigirse a cualquier Gobierno respecto al patrimonio cultural del que es responsable: convertirlo en pieza esencial de la educación de los menores, cuidarlo para que siga manteniéndose vivo y saber proyectarlo para sacar provecho de todo su potencial (también económico). 

De las tareas de la Comisión responsable del cuarto centenario de Cervantes poco se sabe. Y lo que se conoce hasta ahora no es como para tirar voladores (expresión del español de Canarias que no necesita traducción) y parece confirmar que no hay ningún plan claro.

"Desde el trópico de Cáncer" se suma con humildad y pasión contenida a la efeméride que conmemora el 400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes. Y para celebrarlo, asume el compromiso de ir subiendo al blog a lo largo de estas semanas la totalidad de su obra para disfrute de todos los lectores y amantes de la lengua española, lengua a la que él elevó a la máxima expresión literaria. Celebración que culminará los próximos 22 y 23 de abril con la publicación de las dos partes de El Ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha.

Miguel de Cervantes Saavedra (Alcalá de Henares, 29 de septiembre de 1547-Madrid, 22 de abril de 1616) fue un soldado, novelista, poeta y dramaturgo español, conocido con el sobrenombre de "Príncipe de los Ingenios". Está considerado como la máxima figura de la literatura española y es universalmente conocido por haber escrito Don Quijote de la Mancha, que muchos críticos han descrito como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal, además de ser el libro más editado y traducido de la historia, solo superado por la Biblia.

Continúo esta nueva sección del blog dedicada a la conmemoración del 400 aniversario de su muerte con la publicación de su novela La señora Cornelia  en la edición de Florencio Sevilla Arroyo que puede leerse en la página electrónica de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, de la Universidad de Alicante, España.

La señora Cornelia, décima de las Novelas Ejemplares de Cervantes, es una típica novela de aventura protagonizada por dos jóvenes caballeros españoles, don Juan y don Antonio, que contra la opinión de sus padres deciden dejar sus estudios y marchar a Europa a ver mundo. Llegan a Flandes, y después de una estancia allí deciden marchar a Italia. En Bolonia, oyen hablar de la belleza de una joven llamada Cornelia Bentibolli, por lo que se animan a quedarse en ella y retomar los estudios en su famosa universidad. Una noche recogen un bulto que les entregan y que resulta ser un niño. Le encargan el cuidado del mismo a su ama y salen de nuevo a investigar su origen... Disfrútenla.



Miguel de Cervantes


Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt




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Entrada núm. 2658
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[Reedición] Sueños y desasosiegos (de Pessoa)



Fernando Pessoa


"Reedición" es una nueva sección del blog dedicada a reproducir antiguas entradas que tuvieron cierto predicamento en su momento entre los lectores de Desde el trópico de Cáncer. Estas entradas se publican diariamente y conservan su título, fecha y numeración original. Disfrútenla de nuevo si lo desean. 

***

"En tu autobiografía no debes escribir sobre cualquier tema posible; lo que cuentes siempre ha de tener relación contigo". Quien así se expresa es el historiador y filólogo alemán Walter Jens (1923-2013) y la cita la trae a colación el teólogo suizo Hans Küng en el  prólogo del tomo III de sus memorias: Humanidad vivida. Memorias (Trotta, Madrid, 2014). 

Mi profesor en la UNED, el filósofo Emilio Lledó, nos advertía de las profundas diferencias que existen entre los conceptos de "personal", "privado" e "íntimo". Un blog como este no es ni por asomo una autobiografía, aunque pueda paracerlo en algunas ocasiones. Desde luego es algo personal, pero no es privado porque tiene acceso a él cualquier lector curioso, y menos aun es algo íntimo, pues la intimidad, y sigo citando al profesor Lledó, es intransferible por esencia: no podemos contarla ni transmitirla, ni siquiera queriendo, pues es algo tan profundamente nuestro que no puede expresarse con palabras y solo a nosotros nos pertenece. 

¿Y los sueños? ¿Son algo personal, privado, íntimo?. "Los paisajes soñados son solo el humo de paisajes conocidos y el tedio de soñarlos es también casi tan grande como el tedio de contemplar el mundo". Son palabras del escritor portugués Fernando Pessoa (1888-1935) en su "Libro del desasosiego" (Pre-Textos, Valencia, 2014). Mis sueños son personales y privados, mientras yo no me resuelva a contarlos, pero no son algo íntimo porque no forman parte de mi mundo consciente. 

Pessoa no es de esa opinión; "Matar el sueño es matarnos. Es mutilar nuestra alma. El sueño es lo que tenemos realmente de nosotros, impenetrable e inexpugnablemente de nosotros. El Universo, la Vida -sea real o ilusión- es de todos, todos pueden ver lo que veo y poseer lo que poseo o, por lo menos, pueden imaginarse viéndolo [...] Pero lo que sueño nadie puede verlo sino yo, nadie a no ser yo puede poseerlo. Y si mi visión del mundo exterior difiere de como otros lo ven, es porque al verlo pongo sin querer algo de mi sueño, porque algo de mi sueño se pega a mis ojos y mis oídos". 

A mí me gusta soñar. No suelo tener malos sueños ni pesadillas. Mis sueños son casi invariablemente "aventuras" que vivo con personas que conozco o he conocido hace mucho tiempo. Siempre referidos a un tiempo pasado que revivo en ellos sin angustias. Es el despertar, no el sueño ni lo soñado, lo que me produce un cierto desasosiego, y ello porque el recuerdo de lo soñado es efímero y no permanece en mi memoria sino unos instantes después del despertar. 

Hace unos años creo que fue el diario El País el que organizó una encuesta entre sus lectores para preguntarles cual era a su juicio la palabra más hermosa de la lengua castellana. Si no recuerdo mal creo que ganó la palabra "amor"; yo, por mi parte, propuse "desasosiego"; no gané, pero sí vi que bastantes otros lectores también la sugirieron. Me pareció entonces y me sigue pareciendo aun ahora una palabra muy hermosa en su sonoridad y contenido: falta de quietud, tranquilidad o serenidad, quizá porque responde a un estado de ánimo que me resulta muy próximo. 

No recuerdo muy bien como llegué a interesarme por el "Libro del desasosiego" de Fernando Pessoa. Es muy posible que fuera por la lectura de la reseña que del mismo hizo en Revista de Libros, en un ya lejano mayo de 2003, la profesora de literatura portuguesa de la universidad de Barcelona Elena Soler. La cuestión es que hasta hace unos días no me había encontrado en la oportunidad de leerlo. Un reciente artículo de prensa sobre la nueva edición del mismo a cargo del profesor colombiano Jerónimo Pizarro, me animó a hacerlo. Y enfrascado gustosamente en su lectura ando en estos momentos. 

La edición del profesor Pizarro para Pre-Textos dicen que vuelve a las fuentes de los textos que Fernando Pessoa pretendía incluir en su libro con una nueva organización de los mismos que mejora la lectura de casi todos los fragmentos que lo componen y lo convierten en una de las obras literarias más importantes del siglo XX. Una obra maestra póstuma, retrato de la ciudad de Lisboa y de su retratista que oscila entre el diario íntimo, la prosa poética y la narrativa en un conjunto fundamental e imprescindible para comprender el lugar de Fernando Pessoa en la creación de la consciencia del mundo moderno. 

He encontrado una edición electrónica del "Libro del desasosiego" que pueden descargar en este enlace, aunque no puedo garantizar su pulcritud literaria. Espero en cualquier caso que al menos les resulte de interés. 

Esta entrada de hoy reviste una importancia especial para mí, no solo por ser la número 2200 del blog, tras más de ocho años de existencia, sino sobre todo porque me gustaría que representara el inicio de una nueva etapa del mismo más reflexiva y menos promiscua, dejando para mis páginas personales en google, twitter, facebook o eskup el día a día de los comentarios más a vuela pluma o el mero chascarriilo sobre los asuntos de actualidad. En todo caso, gracias mil de nuevo por su amable compañía. 

Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt




Alegoría del sueño



Entrada núm. 2200
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La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)
Publicada originariamente con fecha 1 de diciembre de 2014

jueves, 24 de marzo de 2016

[Celebrando a Miguel de Cervantes] Hoy, "Las dos doncellas"








El próximo 23 de abril se conmemora el 400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes y de William Shakespeare. Como bien decía el editorial de El País del pasado 30 de enero, las comparaciones son odiosas, pero a veces pueden servir para valorar cómo distintos países gestionan desafíos parecidos. Tanto Miguel de Cervantes como William Shakespeare parece que murieron ese mismo día del año 1616, y tanto uno como otro son los mayores referentes de la lengua española y de la inglesa, respectivamente.  

A principios de año el primer ministro de Reino Unido, David Cameron, lanzaba al mundo un rotundo mensaje, que Shakespeare sigue vivo, y poco a poco se ha empezado a concretar la ofensiva internacional de propuestas con las que se pretende proyectar la obra del clásico en 141 países. En cuanto a Miguel de Cervantes, solo existe la vaga afirmación de que están en marcha 131 proyectos —académicos, culturales, turísticos, educativos—. No tiene sentido -sigue diciendo el editorial citado- medir la envergadura de los clásicos por la magnitud de los fastos que se programan para celebrar sus centenarios. Lo que importa es que sean leídos y representados y que su obra siga hablando en el presente. En ese sentido, El Quijote ha contado con prestigiosos valedores que lo llevan mimando desde que en 2005 se celebrara el cuarto centenario de la aparición de su primera parte. El año pasado, que recordaba el aniversario de la publicación de la segunda, hubo excelentes iniciativas que ayudaron a confirmar su grandeza. Pero fueron hechos puntuales, fruto muchas veces de la sociedad, a falta de un verdadero plan riguroso y bien articulado que cumpla con las expectativas que deben exigirse a cualquier Gobierno respecto al patrimonio cultural del que es responsable: convertirlo en pieza esencial de la educación de los menores, cuidarlo para que siga manteniéndose vivo y saber proyectarlo para sacar provecho de todo su potencial (también económico). 

De las tareas de la Comisión responsable del cuarto centenario de Cervantes poco se sabe. Y lo que se conoce hasta ahora no es como para tirar voladores (expresión del español de Canarias que no necesita traducción) y parece confirmar que no hay ningún plan claro.

"Desde el trópico de Cáncer" se suma con humildad y pasión contenida a la efeméride que conmemora el 400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes. Y para celebrarlo, asume el compromiso de ir subiendo al blog a lo largo de estas semanas la totalidad de su obra para disfrute de todos los lectores y amantes de la lengua española, lengua a la que él elevó a la máxima expresión literaria. Celebración que culminará los próximos 22 y 23 de abril con la publicación de las dos partes de El Ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha.

Miguel de Cervantes Saavedra (Alcalá de Henares, 29 de septiembre de 1547-Madrid, 22 de abril de 1616) fue un soldado, novelista, poeta y dramaturgo español, conocido con el sobrenombre de "Príncipe de los Ingenios". Está considerado como la máxima figura de la literatura española y es universalmente conocido por haber escrito Don Quijote de la Mancha, que muchos críticos han descrito como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal, además de ser el libro más editado y traducido de la historia, solo superado por la Biblia.

Continúo esta nueva sección del blog dedicada a la conmemoración del 400 aniversario de su muerte con la publicación de su novela Las dos doncellas, en la edición de Florencio Sevilla Arroyo que puede leerse en la página electrónica de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, de la Universidad de Alicante, España.

Las dos doncellas, novena de las Novelas ejemplares de Cervantes, transcurre en una posada sevillana a la que llega una joven muy triste y llorosa, disfrazada con hábito masculino, que confiesa al desconocido que comparte habitación con ella, la manera en que un joven llamado Marco Antonio la ha deshonrado después de haberla prometido matrimonio. La joven, Teodosia, descubre con horror que el desconocido es en realidad su hermano Rafael, que toma como misión recuperar la honra perdida de Teodosia, buscando a quien cometió con ella tal villanía... Disfruten de ella.



Miguel de Cervantes


Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt




HArendt




Entrada núm. 2657
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[Poesía y humor] Hoy, "Yo os quiero confesar, don Juan, primero", de Bartolomé Leonardo de Argensola. Con viñetas de Padylla



Bartolomé Leonardo de Argensola


Es muy posible que a algún purista le parezca una blasfemia lo que pretendo hacer durante unas semanas: unir en la misma entrada algunos de los más bellos sonetos de amor y a mis viñetistas cotidianos preferidos. Bien, pues lo siento por los puristas, pero un servidor piensa que hay pocas cosas en la vida más serias que el amor y el humor, así pues, ¿por qué no juntarlos?  Todo ello sin mayores pretensiones, aun reconociendo que meter en el mismo envoltorio un soneto de amor y unas viñetas humorísticas, por muy preñadas que estén de crítica social y realidad cotidiana, puede no resultar una fórmula afortunada. En cualquier caso, espero que sean de su agrado. 

El soneto es una composición poética compuesta por catorce versos de arte mayor, endecasílabos en su forma clásica, que se organizan en cuatro estrofas: dos cuartetos y dos tercetos. En el primer cuarteto suele presentarse el tema de la composición, tema que el segundo cuarteto amplifica. El primer terceto reflexiona sobre la idea central expresada en los cuartetos. El terceto final, el más emotivo, remata con una reflexión grave o con un sentimiento profundo desatado por los versos anteriores. De Sicilia, el soneto pasó a la Italia central, donde fue también cultivado por los poetas del "dolce stil nuovo" (siglo XIII). A través de la influencia de Petrarca, el soneto se extiende al resto de literaturas europeas.

Continúo hoy la serie de sonetos de amor con el de Bartolomé Leonardo de Argensola (1562-1631) que comienza con el verso "Yo os quiero confesar, don Juan, primero". Poeta e historiador español del Siglo de Oro, cursó en Huesca estudios de Filosofía y Jurisprudencia, y más tarde de Griego, Retórica e Historia Antigua en Zaragoza bajo la dirección de Andrés Scoto. Posteriormente, en la Universidad de Salamanca, estudia Derecho Canónico y Teología. Y allí conoce a Fray Luis de León con quien comparte la afición por los clásicos y es ordenado sacerdote con veintidós años. Tanto él como su hermano Lupercio fueron protegidos de Fernando de Aragón y Gurrea, duque de Villahermosa. Fue nombrado capellán de la emperatriz María de Austria. Conoce a Cervantes y a Lope de Vega, y en 1613 acompaña en el séquito de literatos al Conde de Lemos a tomar posesión del Virreinato de Nápoles, donde participaría de las actividades de la Academia de los Ociosos. Fue Cronista Mayor de la Corona de Aragón. Miguel de Cervantes le elogia en el «Canto de Calíope» de La Galatea. En su obra poética destaca por su clasicismo, que entronca con la poesía latina Su modelos más imitado son Horacio y Marcial. 



***

YO OS QUIERO CONFESAR, DON JUAN, PRIMERO

Yo os quiero confesar, don Juan, primero,
que ese blanco y carmín de doña Elvira
no tiene de ella más, si bien se mira,
que el haberle costado su dinero.

Pero también que confeséis yo quiero
que es tanta la beldad de su mentira,
que en vano a competir con ella aspira
belleza igual en rostro verdadero.

¿Qué, pues, que yo mucho perdido ande
por un engaño tal, ya que sabemos
que nos engaña igual Naturaleza?

Porque ese cielo azul que todos vemos
ni es cielo ni es azul; ¿y es menos grande,
por no ser realidad, tanta belleza?

Bartolomé Leonardo de Argensola

***


Las viñetas que acompañan la entrada son todas del dibujante canario Padylla, que las publica en el diario La Provincia de Las Palmas de Gran Canaria, y que suele satirizar con buen humor la política local canaria. Disfrutenlas.

VIÑETAS DE PADYLLA




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Entrada núm. 2656
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[Reedición] ¿Podemos? Yes, we can?




Cartel electoral de Podemos


"Reedición" es una nueva sección del blog dedicada a reproducir antiguas entradas que tuvieron cierto predicamento en su momento entre los lectores de Desde el trópico de Cáncer. Estas entradas se publican diariamente y conservan su título, fecha y numeración original. Disfrútenla de nuevo si lo desean. 

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¡Que vaya al psiquiatra quien tenga visiones!
Helmut Schmidt
Canciller de la RFA (1974-1982)

Tengo unos cuantos buenos amigos, y lo que más duele, unas cuantas buenas amigas de hace muchos años, incluso familiares cercanos, que no solo votaron por "Podemos" en las pasadas elecciones al parlamento europeo sino que cada vez están más entusiasmados con ellos. No comparto su entusiasmo, pero los comprendo. Aunque mi comprensión no llega hasta el extremo de consolarme. A mí el populismo de que hace gala "Podemos" no me da miedo; no creo que sean los vándalos de los que escribía hace unos días en el blog, pero me provocan sarpullidos. Y como ya tienen apologistas bastantes para que necesiten de mis servicios profesionales, permítanme que me sume -sin acritud, como decía con acento sevillano Felipe González- al equipo de abogados del diablo que coadyuvan a intentar demostrar cuanto de falacia hay en el equipo directivo de "Podemos" y de ignorancia no-culpable, pero también no-excusable, en sus enfervorizados seguidores. Es el riesgo que corre todo movimiento ciudadano y popular cuando decide entrar en el juego y convertirse en parte de lo criticado: que pierden su virginal inocencia y tienen que apechugar con las consecuencias. Que ello sea para bien o para mal, está por ver.

Lo primero de todo es reconocer que los cabreados de este país nuestro, entre los que yo también me cuento, tienen toda la razón, multitud de razones, para estarlo. Lo segundo, decirles que "Podemos" no va a resolverles las motivaciones de su cabreo; como mucho, a agravárselas. Si no, al tiempo, que arrieros somos y en la era nos veremos. Y lo tercero, y no lo digo por curarme en salud o ponerme la venda antes de la herida, que no soy su enemigo, de verdad; que siempre aceptaré lo que las urnas digan en unas elecciones limpias y democráticas, que no creo que sean un peligro público, pero sí que ocultan más de lo que enseñan.

Y ahora, hablemos del otro "Podemos", el del "Yes, we can". ¿En qué han quedado las ilusiones despertadas por la elección de Obama como presidente de los Estados Unidos de América? ¿En qué ha mejorado la situación de iraquíes y afganos con la salida de las tropas estadounidenses y de la OTAN? ¿Qué ha pasado con la primavera árabe? ¿En qué ha quedado la alegría de los libios? ¿Y el conflicto de nunca acabar palestino-israelí? ¿Y los presos de Guantánamo? ¿Y la sanidad universal norteamericana? ¿Y el cambio climático?  ¿Y la inmigración ilegal? Bueno, podemos decir, por lo menos un negro ha llegado a la presidencia, lo que visto lo visto, no es poco logro. Ahora solo falta que llegue a ella una mujer. Pero todavía queda mucha tela que cortar... En el ínterin, les invito a leer este artículo del profesor Julio Aramberri: "El final del principio" sobre la decepción Obama.

Alguno se preguntará con razón que tienen que ver "Podemos" (o Pablo Iglesias) y Obama: Nada, evidentemente. Salvo que los dos levantaron expectativas por encima de sus posibilidades. Y que como dice la sabiduría popular, los experimentos (sociales) en casa y con gaseosa, por favor, que desde la Atenas del siglo V a.C. para acá pocas cosas nuevas veredes en política, amigo Sancho, bajo el sol.  

Termino. Les dejo estos enlaces a cinco artículos de prensa muy críticos con "Podemos". Los cinco de profesores universitarios, que, en principio, no están en la lucha partidista del día a día y cabe presumir no buscan réditos políticos ni electorales. ¿Qué alguno se pasa?, es posible que sí, pero eso no quita que puedan tener razón en lo que dicen: "El síndrome de Sansón", de Joaquín Leguina; "Mucha frase, ningún discurso", de Santos Juliá; "Un partido de profesores", de Félix de Azúa; "Podemos en el país de Nunca Jamás", de Jose Carlos Díez;  y por último, "Pablo Iglesias: ¿Tú ser socialdemócrata", de José Ignacio Torreblanca. Como pueden ver todos ellos escritos por gente derechosa integrante de la casta a extinguir. Vale. Les prometo no volver a insistir sobre este asunto, pero necesitaba quitarme la espinita de encima. Quitada está, y así lo dejamos. Fin de la historia.

Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt




¿Y Guantánamo, la sanidad universal y la inmigración ilegal: qué?



Entrada núm. 2201
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Publicada originariamente el día 2 de diciembre de 2014

miércoles, 23 de marzo de 2016

[Celebrando a Miguel de Cervantes] Hoy, "La ilustre fregona"





El próximo 23 de abril se conmemora el 400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes y de William Shakespeare. Como bien decía el editorial de El País del pasado 30 de enero, las comparaciones son odiosas, pero a veces pueden servir para valorar cómo distintos países gestionan desafíos parecidos. Tanto Miguel de Cervantes como William Shakespeare parece que murieron ese mismo día del año 1616, y tanto uno como otro son los mayores referentes de la lengua española y de la inglesa, respectivamente.  

A principios de año el primer ministro de Reino Unido, David Cameron, lanzaba al mundo un rotundo mensaje, que Shakespeare sigue vivo, y poco a poco se ha empezado a concretar la ofensiva internacional de propuestas con las que se pretende proyectar la obra del clásico en 141 países. En cuanto a Miguel de Cervantes, solo existe la vaga afirmación de que están en marcha 131 proyectos —académicos, culturales, turísticos, educativos—. No tiene sentido -sigue diciendo el editorial citado- medir la envergadura de los clásicos por la magnitud de los fastos que se programan para celebrar sus centenarios. Lo que importa es que sean leídos y representados y que su obra siga hablando en el presente. En ese sentido, El Quijote ha contado con prestigiosos valedores que lo llevan mimando desde que en 2005 se celebrara el cuarto centenario de la aparición de su primera parte. El año pasado, que recordaba el aniversario de la publicación de la segunda, hubo excelentes iniciativas que ayudaron a confirmar su grandeza. Pero fueron hechos puntuales, fruto muchas veces de la sociedad, a falta de un verdadero plan riguroso y bien articulado que cumpla con las expectativas que deben exigirse a cualquier Gobierno respecto al patrimonio cultural del que es responsable: convertirlo en pieza esencial de la educación de los menores, cuidarlo para que siga manteniéndose vivo y saber proyectarlo para sacar provecho de todo su potencial (también económico). 

De las tareas de la Comisión responsable del cuarto centenario de Cervantes poco se sabe. Y lo que se conoce hasta ahora no es como para tirar voladores (expresión del español de Canarias que no necesita traducción) y parece confirmar que no hay ningún plan claro.

"Desde el trópico de Cáncer" se suma con humildad y pasión contenida a la efeméride que conmemora el 400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes. Y para celebrarlo, asume el compromiso de ir subiendo al blog a lo largo de estas semanas la totalidad de su obra para disfrute de todos los lectores y amantes de la lengua española, lengua a la que él elevó a la máxima expresión literaria. Celebración que culminará los próximos 22 y 23 de abril con la publicación de las dos partes de El Ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha.

Miguel de Cervantes Saavedra (Alcalá de Henares, 29 de septiembre de 1547-Madrid, 22 de abril de 1616) fue un soldado, novelista, poeta y dramaturgo español, conocido con el sobrenombre de "Príncipe de los Ingenios". Está considerado como la máxima figura de la literatura española y es universalmente conocido por haber escrito Don Quijote de la Mancha, que muchos críticos han descrito como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal, además de ser el libro más editado y traducido de la historia, solo superado por la Biblia.

Continúo esta nueva sección del blog dedicada a la conmemoración del 400 aniversario de su muerte con la publicación de su novela La ilustre fregona, en la edición de Florencio Sevilla Arroyo que puede leerse en la página electrónica de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, de la Universidad de Alicante, España.

La ilustre fregona, octava de las Novelas ejemplares de Cervantes, es la historia de un amor imposible por causa de diferencias sociales que la fortuna se encargará de resolver.  Diego de Carriazo y Tomás de Avendaño, de nobles familias burgalesas, desean una vida de aventura y picaresca y a tal fin preparan un plan de cara a los padres de ambos que pasa por simular deseos de estudiar en Sevilla. De viaje hacia allí, llegan a Toledo, donde oyen hablar de la belleza de una muchacha de origen humilde que trabaja de fregona, llamada Constanza. 

En Toledo, donde llegan los protagonistas, se comenta la belleza de Constanza, y Tomás decide no irse de la ciudad sin verla. Los amores de Tomás por Constanza y por otro, la picaresca vida toledana de Diego, son la trama fundamental de la obra. Al final de la novela, los dos jóvenes se casan con mujeres de su propio nivel social: Diego, con la hija del Corregidor de Toledo, y Tomás con Constanza, que resulta no ser quien parecía...



Miguel de Cervantes


Disfruten de ella. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt




HArendt




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La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

[Reedición] Los Derechos Humanos: Reflexiones sobre ellos en su Día Mundial de 2014






"Reedición" es una nueva sección del blog dedicada a reproducir antiguas entradas que tuvieron cierto predicamento en su momento entre los lectores de Desde el trópico de Cáncer. Estas entradas se publican diariamente y conservan su título, fecha y numeración original. Disfrútenla de nuevo si lo desean. 

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A mi amiga Germana Roy, con inmenso cariño

Tal día como hoy de hace sesenta y seis años, el 10 de diciembre de 1948, la Asamblea General de la recién creada Organización de las Naciones Unidas, reunida en París, aprobaba y promulgaba solemnemente la Resolución 217A (III) que contenía la Declaración Universal de Derechos Humanos. Su elaboración, encomendada a una comisión especial de dieciocho miembros presidida por Eleanor Roosevelt, la viuda del presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt, duró dos años. La redacción final de la resolución, conocida como Proyecto Ginebra, por la ciudad donde se ultimó, corrió a cargo del francés René Cassin. Fue aprobada sin ningún voto en contra y ocho abstenciones.


Aunque algunos remontan su origen remoto al denominado "Rollo de Ciro", por el emperador persa de ese nombre del siglo VI a.C., sus antecedentes más inmediatos son, con toda evidencia, la Declaración de Derechos de Virginia de 1776 y la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano francesa de 1789. 

La Declaración Universal de Derechos Humanos de Naciones Unidas supuso, a tres años del final del más sangriento conflicto bélico sufrido nunca por la humanidad, un aldabonazo moral de primer orden. Hay un precioso librito de la historiadora y profesora estadounidense Lynn Hunt: La invención de los derechos humanos (Tusquets, Barcelona, 2011), que parte de la necesidad de explicar el hecho de que los Padres Fundadores de la gran nación norteamericana pudieran sostener como evidente el principio de que todos los hombres son creados iguales en una sociedad en que la desigualdad era una realidad apabullante. Para ello, parte de la tesis de que a partir de la segunda mital del siglo XVIII nuevas formas de leer crearon nuevas experiencias individuales que, a su vez, hicieron posibles nuevos conceptos sociales y políticos que volvieron evidente a la gente normal nuevas formas de comprender y a partir de ello nuevos tipos de sentimientos. Para Lynn Hunt, dice el profesor Roberto Luis Blanco Valdés al reseñar su obra en Revista de Libros (mayo, 2011), la respuesta a esa pregunta está en aproximarse al estudio y comprensión de esos nuevos derechos evidentes en una sociedad tan dispar a partir de la aparición de nuevos sentimientos de empatía derivados de la lectura de libros epistolares como los de Rousseau, Richardson o Adam Smith, todos ellos producto de la Ilustración, en los que la empatía por el sufrimiento y el dolor ajeno enseñaron a sus lectores a pensar en "los demás" como sus iguales y semejantes haciendo brotar en ellos el sentimiento de la existencia de unos derechos humanos evidentes a pesar de todas las desigualdades e injusticias reales también evidentes. De ahí que las revoluciones americana y francesa, y sus consiguientes Declaraciones de Derechos, puedan y deban considerarse antecedentes directos de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948.

Sesenta y seis años después de esa Declaración el balance no cabe calificarlo sino de positivo. aunque mucho más lento de lo que habría cabido esperar. Organizaciones de defensa de los derechos humanos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, ponen cada año en sus respectivos informes anuales, el dedo en una llaga que no acaba de cerrarse. El informe de Amnistía Internacional 2013, organización con la que me siento orgullo de colaborar asiduamente, expone en datos y cifras el número de Estados que en ese año torturaron a sus ciudadanos, reprimieron la libertad de expresión, toleraron juicios injustos, encarcelaron a presos de conciencia, llevaron a cabo ejecuciones, cometieron homicidios ilegales y desalojaron de sus casas a hombres mujeres y niños. El informe de Human Rights Watch, por su parte, se centra este año en el examen de las lagunas que en la defensa de los derechos humanos evidencian los Estados de la Unión Europea, concretamente en materias como inmigración y asilo, discriminación, intolerancia y lucha antiterrorista, sacándole los colores a Estados como Alemania, España, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Países Bajos, Polonia, Reino Unido o Rumanía.

A la vista de todo ello parece lícito preguntarse si existe un progreso moral real de la humanidad. Uno de los que dice que sí y que no al mismo tiempo es el profesor Javier Gomá Lanzón, que en un artículo de hace unos años en Revista de Libros (agosto 2008) concluía aseverando: "la misma civilización que ha sabido progresar moralmente ganando a la opresión una más amplia esfera de libertad, ha usado esa libertad ampliada, en una medida no despreciable, para la inmoralidad más perversa, haciendo descender al hombre a unas profundidades de abyección y envilecimiento imposibles de predecir. De lo que se sigue, en fin, que si desde la perspectiva de la libertad cabe confirmar la existencia comprobada de un progreso moral, desde la del contenido de esa libertad y de su ejercicio efectivo sería casi un sarcasmo mantener semejante aserto. De ahí, añade, el matizado sí y no a la pregunta que se suscitó al principio".

Uno de los que dice que sí, que ese progreso moral existe y que vivimos en el mejor de los mundos posibles contra toda evidencia, es el prestigioso psicólogo estadounidense Steven Pinker en su libro "Los ángeles que llevamos dentro. El declive de la violencia y sus implicaciones" (Paidós, Barcelona, 2013). A analizar ese libro y la veracidad de los datos en él expuestos, le dedicaron sendos artículos en mayo de 2013 en Revista de Libros Juan Antonio Rivera y mucho más recientemente en El País del pasado 7 de diciembre Marc Bassets. La conclusión a la que llegan, y yo con ellos,  es que, efectivamente, a la vista incontrovertible de los datos que se exponen es muy probable que vivamos en el mejor de los mundos posibles, pero que esa verdad que los datos acreditan, en mi opinión, y como ya dije hace unos días comentando en las redes sociales el artículo de Rivera, el corazón no la percibe.

Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt








Entrada núm. 2204
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La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)
Publicada originariamente con fecha 10 de diciembre de 2014