viernes, 13 de mayo de 2016

[Galdós en su salsa] Hoy, con "Trafalgar"



Escultura de Galdós en Las Palmas de G.C. (Pablo Serrano, 1969)


Si preguntan ustedes a cualquier canario sobre quien en es su paisano más universal, no tengan duda alguna de cual será su respuesta: el escritor Benito Pérez Galdós. Para conmemorar su nacimiento, del que acaban de cumplirse 173 años, voy a ir subiendo al blog a lo largo de los próximos meses su copiosa obra narrativa, que comienzo con Trafalgar, el primero de sus "Episodios Nacionales", colección de cuarenta y seis novelas históricas escritas entre 1872 y 1912 que tratan acontecimientos de la historia de España desde 1805 hasta 1880, aproximadamente. Sus argumentos insertan vivencias de personajes ficticios en los acontecimientos históricos de la España del XIX como, por ejemplo, la guerra de la Independencia Española, un periodo que Galdós, aún niño, conoció a través de las narraciones de su padre, militar que había participado y combatido en ella.

Trafalgar es la primera novela de la primera serie de los "Episodios Nacionales". En ella se narra la historia del joven gaditano Gabriel de Araceli, que a los 14 años se ve envuelto en la batalla de Trafalgar como criado de un viejo oficial de la Armada en la reserva. Pueden leerla o descargarla en el enlace anterior en la versión de Enrique y Arturo Mélida existente en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes de la Universidad de Alicante.  

Nacido en Las Palmas de Gran Canaria, en las islas Canarias, el 10 de mayo de 1843 y fallecido en Madrid el 4 de enero de 1920, Benito Pérez Galdós fue un novelista, dramaturgo, cronista y político español. Considerado como uno de los mejores representantes de la novela realista del siglo XIX y un un narrador esencial en la historia de la literatura en lengua española, hasta el punto de ser propuesto por diversos especialistas y estudiosos de su obra como el mayor novelista español después de Cervantes. Galdós transformó el panorama novelístico español de la época, apartándose de la corriente romántica en pos del realismo y aportando a la narrativa una gran expresividad y hondura psicológica. En palabras de Max Aub, Galdós, como Lope de Vega, asumió el espectáculo del pueblo llano y con su intuición serena, profunda y total de la realidad, se lo devolvió, como Cervantes, rehecho, artísticamente transformado. De ahí, añade, que desde Lope ningún escritor fue tan popular, ninguno tan universal desde Cervantes. Fue desde 1897 académico de la Real Academia Española y llegó a estar propuesto al Premio Nobel de Literatura en 1912.



La batalla de Trafalgar


Disfruten de la novela. Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt




HArendt




Entrada núm. 2725
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La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)

4 comentarios:

Qué ignorita más bonita dijo...

Durante una época, hace muchísimos años, me aficioné a Galdós, tras leerme Fortuna y Jacinta; de ahí fui, no exactamente en ese orden, a Doña Perfecta, Misericordia, Miau, Tormento,... Comencé años más tarde Trafalgar, pero no pasé de las primeras páginas, y no porque fuera mala, sino, tal vez, ya era tarde y se me acumulaban otros libros. Proyecto interesante el de dar a conocer los Episodios Nacionales. Un beso, Carlos.

HArendt dijo...

A mí ha pasado al revés. Leí los Episodios y no pude con sus novelas. Pero hay las tengo, esperando. Quizá esta sea la oportunidad, Ángeles, de enfrentarme a ellas. Un beso.

HArendt dijo...

¡Perdón, perdón por ese "hay" que daña los sentidos! Denlo por sustituido por el "ahí" correspondiente. Mil perdones....

Mark de Zabaleta dijo...

Gran novela...