sábado, 7 de octubre de 2017

[Poesía y pintura] Hoy, con Jorge Guillén y Camille Corot






Retomo la publicación, con un formato diferente, de la serie de entradas del blog dedicadas al "tema de España" en la poesía española contemporánea, que tuvieron tan buena acogida de los lectores hace años. Grandes poetas contemporáneos españoles, poetas del exilio exterior e interior, pero españoles todos hasta la médula, que cantaron a su patria común, España, desde el corazón y la añoranza. 

En estos momentos en que hijos espurios reniegan de ella, la insultan, la mancillan, y pretenden acallar las voces de aquellos otros que nos alzamos orgullosos de pronunciar su nombre, nada mejor que la poesía para reivindicarla como se merece. Si como dijo Walt Whitman la poesía es el instrumento por medio del cual las voces largamente mudas de los excluidos dejan caer el velo y son alcanzados por la luz, también es, en palabras de ese gran poeta y gran español que fue Gabriel Celaya, un arma cargada de futuro. Empuñémosla, entonces, en su defensa.

Hoy traigo al blog al poeta Jorge Guillén y su poema 12 de Octubre. Y junto a la gravedad serena de la poesía, el contrapunto gozoso y sensual del pintor Camille Corot y su cuadro La fuente. Disfrútenlos.

Jorge Guillén Álvarez (1893-1984) fue un poeta y crítico literario español, integrante de la Generación del 27. Sus poemas parten de situaciones concretas para extraer de ellas las ideas o sentimientos más quintaesenciados; el estilo que adopta está al servicio de tal proceder: usa un lenguaje extraordinariamente elaborado, tras un riguroso proceso de eliminación y selección; despoja al lenguaje de los halagos de la musicalidad fácil y de otros recursos que tocan directamente nuestra sensibilidad; de ahí que su poesía resulte difícil no por su acumulación de ornato, sino por su condensación y densidad: cada frase, cada palabra intenta desnudar la esencia de lo que el poeta nos presenta. 


12 DE OCTUBRE
por
Jorge Guillén

España quiso demasiado (Nietzsche)
L'affannosa grandiosità della Spagna (Croce)

-Esa España que quiso demasiado
Con grandeza afanosa y tuvo y supo
Perderlo todo ¿se salvó a sí misma?

-De su grandeza queda en las memorias
Un hueco resonante de Escoriales,
De altivos Absolutos a pie firme.

-No, no. Más hay. Desbarra el plañidero.
Hubo ardor ¿Hay cenizas? Una brasa.
Arde bien. Arde siempre.


Jean-Baptiste-Camille Corot (1796-1875) fue un pintor francés de paisajes, uno de los más ilustres de dicho género y cuya influencia llevó al impresionismo. De familia acaudalada, Corot recibió una educación burguesa y realizó sus estudios secundarios en la ciudad gótica y normanda de Ruan, entre 1807 y 1812, tales estudios le marcaron definitivamente. Gran lector de Rousseau y próximo a las ideas ilustradas, de quien adquirió el gusto por la naturaleza. 



La fuente, por Camille Corot (1870)
Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid



Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: vámonos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt



HArendt






Entrada núm. 3895
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)