sábado, 30 de diciembre de 2023

[ARCHIVO DEL BLOG] Analfabetos. [Publicada el 05/01/2016]









El escritor Javier Cercas escribía hace unos días un rabioso artículo en El País, titulado ¡Visca Cataluña, viva Espanya!, en el que ponía literalmente a caldo a los que destrozan los idiomas, en este caso el español y el catalán a partes iguales, en base a una supuesta corrección política que nada en absoluto tiene que ver con la idiomática. Objeto preferente de sus puyas, los políticos, por un lado, y los periodistas y locutores televisivos y radiofónicos, por otro. 
El Diccionario de la Lengua Española define "analfabeto" como aquella persona que no sabe leer ni escribir, como sustantivo; y como persona ignorante, sin cultura, o profano en alguna disciplina, como adjetivo.
A mi entender hay un analfabetismo excusable que es de las personas que por su edad o situación social nunca pudieron acceder a la escuela y no tuvieron ocasión de aprender a leer y escribir. Es ese un analfabetismo residual, prácticamente extinguido en nuestro país y en todo Occidente. Luego, existe por desgracia un analfabetismo funcional bastante extendido, producto de una enseñanza mal entendida y peor aplicada centrada en el desarrollo de las capacidades personales propias, obviando que el dominio correcto del idioma hablado y escrito de cada uno es nuestra mejor herramienta de comunicación con los otros y de desarrollo de nuestras capacidades. Analfabetismo funcional del cual somos responsables todos, comenzando por las autoridades académicas, los profesores a todos los niveles de la enseñanza, los padres, y por supuesto, los propios alumnos. Y por último nos encontramos con el analfabetismo que yo denomino obtuso, y que podríamos asimilar a los que usan el idioma  como instrumento de corrección política, propaganda o simple ejercicio de petulancia ignorante. Es decir, políticos en activo y líderes de opinión y audiencia mediática.
Javier Cercas, como señalé más arriba, centra sus diatribas en la clase política y las personifica en la frase que da título a su artículo: ese "Visca Cataluña, viva Espanya", que ofende a ambos idiomas, catalán y castellano, por igual. Pero las extiende a los que cuando se expresan en castellano dicen y escriben, por ejemplo, Lleida o Girona, algo que no hacen cuando se refieren a Nueva York o Londres, por citar dos ciudades emblemáticas. Pone bastante más ejemplos de los que yo acabo de mencionar. Y las críticas no son unidireccionales, así que merece la pena leerlo.
Curiosamente, se olvida de esas palabras, tan políticamente correctas como infames desde el punto de vista lingüístico, de periodistas y locutores castellano parlantes (o escribientes), empecinados en decir y escribir "parlament", o "president" o "Generalitat" cuando, en perfecto (más o menos) castellano, pretenden referirse al parlamento, el presidente o la Generalidad (Gobierno) de Cataluña. Hagan ustedes el esfuerzo de leer sin mofarse una frase imaginaria como esta: "El president de los United States of América, la queen del United Kingdom, y el presidente del gobierno español han entrado juntos a la House of Commons durante su visita a la ciudad de London". Patético, ¿no creen? Pues vamos camino de eso.
Sobre los presuntos creadores de opinión periodísticos, televisivos y radiofónicos, preferible no hablar; ya lo hacen ellos a destajo por nosotros, con alevosía, premeditación, nocturnidad y desprecio de sexo, todas ellas circunstancias agravantes del ilícito penal. Pero como si oyeran llover; les da lo mismo. Carezco de información veraz como para afirmar o negar si en las Facultades universitarias de periodismo o ciencias de la información enseñan a hablar y escribir a sus alumnos, pero si nos remitimos a las pruebas, da la impresión de que no lo hacen. O por lo menos, que no lo hacen bien, Y ahora, como decía Sócrates, Ιωμεν: nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt











viernes, 29 de diciembre de 2023

Del discurso del rey visto por una exiliada

 






Hola de nuevo. Y de nuevo a todos feliz viernes. Como exiliada de mi propio país, veo al rey Felipe consciente del peligro de que los españoles, por muy unidos que estén  en su satisfacción por el camino recorrido desde el fin de una dictadura, se dividan por interpretaciones contrarias y desavenencias políticas, comenta hoy en El País la novelista nicaragüense Gioconda Belli. No veo yo ese peligro inminente, pero existir, existe. Y no sería la primera vez que ocurre. Por eso sería oportuno rebajar un poco la crispación, que por otro lado, solo es política y no social. Sean felices, por favor. O al menos no dejen de intentarlo. HArendt. harendt.blogspot.com









El discurso del Rey visto por una exiliada
GIOCONDA BELLI
29 DIC 2023 - El País - harendt.blogspot.com

Para una persona como yo, que proviene del universo alternativo de naciones como Nicaragua donde la democracia no pasa de ser una esperanza y que incluso cuando se realiza es tan frágil y efímera como una mariposa y deriva en tiranía, escuchar el mensaje navideño del Rey Felipe VI es entrar dentro de otra dimensión. El rey es un hombre sereno, bien parecido, dueño de una voz pausada propia de una autoridad familiar que le viene de siglos y que asume de manera natural. Es el hombre que hemos visto obedecer al amor al casarse y ser un padre afectuoso y cercano para sus hijas. Algo tiene la tradición que seduce, por mucho que uno comprenda las contradicciones de su procedencia. Ver al rey en este primer año en que escucho su mensaje como habitante de España, donde ahora vivo, me inspiró respeto por la institucionalidad que representa. Las diversas facetas de la democracia española me han parecido dignas y sobresalientes. El mensaje del rey, en un momento de tensiones como el que vivimos me pareció muy pertinente. Sentí que es consciente del peligro de que un país, por muy unido que esté en su satisfacción por el camino recorrido desde el fin de una dictadura, se divida por interpretaciones contrarias y desavenencias políticas. En los últimos años hemos sido testigos en el mundo del efecto trepidante que tienen las palabras en boca de personas públicas que no miden aquello de que “quien siembra vientos, cosecha tempestades”. Hemos visto discursos desmesurados sacar a flote las pasiones y frustraciones cotidianas de los oyentes y afilarlas con insidia para generar odio y enemistad donde antes sólo había diferencias de opinión. Los que desatan esas corrientes se fascinan con el poder de sus arengas. Quizás no se percaten, al inicio, de las tormentas que siembran, pero una vez desatado el vendaval no logran evitar la fascinación del empoderamiento que les causa el eco de sus rugidos.
Las desigualdades sociales, el creciente individualismo, las presiones del consumismo, el racismo, el sexismo y tantos más ismos; la retroalimentación del despecho que amplifican las redes sociales, ha creado un caldo de cultivo para las tormentas perfectas que sacrifican la madurez y la ecuanimidad en aras de agendas iracundas. Como hemos visto en Estados Unidos, un solo individuo, inescrupuloso con la verdad, ha logrado generar un fenómeno de masas que ha puesto en jaque el funcionamiento de una de las democracias más consolidadas de Occidente.
Entiendo y concuerdo con la percepción del rey de que la excepcionalidad de este país merece cuidarse, como un tesoro urdido tras mucho esfuerzo y dolor. Gioconda Belli es novelista y poeta.













De los monstruos sagrados

 







Hola de nuevo. Y de nuevo a todos feliz viernes. La veneración que suscitaban grandes artistas como Gérard Depardieu, escribe en El Pais de hoy la cineasta Isabel Coixet, les ha permitido no rendir cuentas nunca de sus conductas abusivas y sus admiradores hemos preferido a veces mirar hacia otro lado. ¿Cómo van a ser creídas sus víctimas si hasta el mismo presidente de Francia las niega? Sean felices, por favor. O al menos no dejen de intentarlo. HArendt. harendt.blogspot.com











Los monstruos sagrados no existen
ISABEL COIXET
29 DIC 2023 - El País

En el verano de 2015 recibí la llamada de un productor francés de televisión: me preguntaba si quería participar en un programa para Canal Plus Francia, como parte de una serie en la que Gérard Depardieu comía en diversas ciudades europeas con una personalidad de la ciudad. Habían grabado ya en Viena, Roma, Londres y ahora era el turno de Barcelona. Al parecer, Depardieu había visto mis películas (ambos habíamos participado en el proyecto “Paris je t’aime”) y me proponía la filmación de una comida entre ambos en un lugar de mi elección, dije que sí inmediatamente. Depardieu significaba para mi Marguerite Duras, Bárbara, Truffaut, Les valseuses, Vera Granger; un sinfín de referencias fascinantes que habían marcado mi vida .
Era junio, hacía calor. Llegué pronto al restaurante, saludé al equipo, las dos cámaras ya estaban preparadas, los técnicos de sonido me microfonaron, el actor estaba en el baño. El presentador del programa se me acercó hecho un manojo de nervios y me rogó que estuviera tranquila y que tuviera paciencia porque Gérard estaba cansado y no le gustaba el calor. Le dije que no se preocupara. Apareció en ese momento el actor quejándose efectivamente a grito pelado del calor. Lo primero que me dijo es porqué había escogido un lugar sin aire acondicionado. Lo segundo fue, mostrándome su flamante pasaporte ruso, preguntarme qué me parecía Putin. No esperó a que le respondiera y empezó a hablar maravillas de su colega Putin con interjeciones de “putain de chaleur espagnol”. Lo que siguió fue una de las comidas mas desquiciadas que recuerdo en mi vida. Recuerdo un desfile continuo de botellas de vino blanco, recuerdo boquerones, jamón, recuerdo camareros trayendo platos de bombas de la Barceloneta y sonsos fritos, gritos, muchos gritos, obscenidades (tenía que comentar el físico de todas las mujeres que pasaban por el restaurante, cosa que yo penosamente intentaba pasar por alto, ésta es la única cosa de la que me arrepiento) kleenex sudados por doquier, su camisa blanca empapada de sudor... Recuerdo al desesperado presentador intentando que habláramos de gastronomía y mis intentos no menos desesperados de hablar de los orígenes de aquel barrio y de aquel restaurante. Yo intentaba aferrarme en mi cabeza a Duras, Barbara, Truffaut etc, pero Depardieu solo quería hablar de los abusivos impuestos que se pagaban en Francia y de lo bien que le trataban en Rusia. Hubo un momento, cuando ya traían los postres, en que ya no pude mas y unas palabras fatídicas salieron de mi boca: “a mí tu amigo Putin me parece un dictador y un asesino”. Allí ya se descarriló definitivamente la cosa y Depardieu me acusó de formar parte de la izquierda idiota que no entendía, que el ejemplo a seguir era tratar a los millonarios con guante blanco, como hacía su colega Vladimir. Yo solo maldecía el momento en que comer con Gérard Depardieu y grabar un programa de televisión me habían parecido buenas ideas. Luego me enteré que en cada ciudad había pasado prácticamente lo mismo: aquellos programas afortunadamente nunca vieron la luz del día. Me fui del restaurante cuando empezó a beber orujo directamente de la botella: me daba pena ver a aquel inmenso actor comportarse como el ser patético y visiblemente alcoholizado con el que había comido. Pero que a alguien no le guste pagar impuestos en su país o que sea amigo de Putin o que beba tres botellas de vino seguidas como quien bebe agua con gas, no le convierte en un abusador ni en un criminal. Y sin embargo, cuando aparecieron las primeras acusaciones contra él, no puedo decir que me sorprendiera. La persona que había tenido delante durante tres horas eternas era claramente alguien quien creía que todo le estaba permitido, alguien acostumbrado a salirse con la suya siempre, en cualquier circunstancia. Alguien tan encastillado en su propio magnetismo y en su aura que parecía completamente ajeno a cualquier argumento exterior.
En los últimos cinco años una serie de mujeres han acusado al actor de varios grados de abusos sexuales desde tocamientos en pleno rodaje hasta la violación ( en dos casos) . La fiscalía francesa ha admitido dos de estas denuncias y ahora una tercera por parte de una periodista española. Por otro lado France 2 la semana pasada emitió un programa Complément d’enquête en el que se ve y se escucha al actor hacer toda clase de comentarios asquerosos, incluidos los peores sexualizando a una niña de 11 años. Las imágenes han sido pasadas por un control judicial para demostrar que no ha habido ninguna manipulación en su montaje. Lo que resulta particularmente penoso es que desde el mismísimo presidente Macron hasta una serie de actores, directores y escritores que son sus colegas, defiendan en un manifiesto publicado por Le Figaro a Gérard Depardieu del “injusto y espantoso linchamiento “al que está siendo sometido con el argumento de que es “un tesoro nacional francés, un monstruo sagrado y el mejor actor de la historia”, además de equiparar las acusaciones contra él a “un ataque al arte”. Por supuesto ni una mención a las mujeres que se han atrevido a denunciarle, ni siquiera para otorgarles también el beneficio de la duda porque sus testimonios y el modus operandi del actor resulta sospechosamente familiar en todos los casos. Como si esa encarnación “del arte” le otorgara una inmunidad total para hacer lo que le diera la gana .
Nadie está poniendo en tela de juicio la calidad de Depardieu como actor o como patrimonio de la humanidad o como “gigante del cine”. Como nadie discute que Polanski es un director de talento o Plácido Domingo poseía una espléndida voz. Hablamos de como el estatus de monstruos sagrados y la veneración que suscitaban, han permitido a tantos y tantos artistas no rendir cuentas nunca de sus conductas abusivas. En ningún lugar del mundo. Nosotros los admiradores, hemos preferido en muchas ocasiones mirar para otro lado porque la idea que alguien a quien venerábamos y respetábamos fuera un ser deleznable no nos cabía en la cabeza, no encajaba con lo que queríamos creer. Yo misma ¿por qué no me levanté de esa mesa a la primera inconveniencia , al primer improperio, en vez de aguantar aquella cháchara insoportable? Porque en mi cabeza tenía fijada la escena del parking de La mujer de al lado , los diálogos con Duras en El camión, el dueto con Barbara en Lily passion. No quería ver que el hombre que tenía delante era alguien capaz de ser un monstruo sagrado y comportarse sencillamente como un monstruo. Ahora muchos de estos hombres dicen ser “víctimas de las víctimas” que recuerda en otra esfera, al concepto de “dictadura de las minorías”. Los que firman el manifiesto a favor de Depardieu afirman que el hombre al que conocen es incapaz de hacer las cosas de las que se le acusa: ésa es otra de las características de los depredadores. Depardieu nunca abusó de las consagradas actrices Carole Bouquet (con la que convivió durante años) de Natalie Baye, de Carla Bruni o de Catherine Deneuve. Sus víctimas han sido siempre jóvenes actrices, aspirantes a escritoras, periodistas: mujeres vulnerables, sin aura, sin estatus, sin inmunidad, que difícilmente van a ser escuchadas o creídas. ¿Cómo van a ser creídas si hasta el mismo presidente de Francia las niega? Una de las primeras en acusarle fue Emanuelle Deveber, una actriz que debutó con él en la película Danton en 1980 y que posteriormente abandonó el cine. El día después de la emisión del programa Complement d’enquete, se suicidó tirándose al Sena. Isabel Coixet es directora de cine.













De la juventud de hoy

 








Hola, buenos días de nuevo a todos y feliz viernes. Los jóvenes de hoy son un desastre, comenta en mi propuesta de lectura para hoy en El País el politólogo Víctor Lapuente. Siempre han sido un desastre, añade: contradicen a sus padres y tiranizan también a los pedagogos y profesores, decían en Grecia hace 2.500 años. Se la recomiendo encarecidamente y espero que junto con las viñetas que la acompañan, en palabras de Hannah Arendt, les ayude a pensar para comprender y a comprender para actuar. Sean felices, por favor, aun contra todo pronóstico. Nos vemos mañana si la diosa Fortuna lo permite. Tamaragua, amigos míos. HArendt. harendt.blogspot.com











La juventud de hoy
VÍCTOR LAPUENTE
25 DIC 2023 - El País - harendt.blogspot.com

Los jóvenes de hoy son un desastre. Siempre han sido un desastre. Contradicen a sus padres y tiranizan también a los pedagogos y profesores, decían en Grecia hace 2.500 años. Piensan que lo saben todo, advertía Aristóteles. No prevén lo que es útil, se lamentaba Horacio. Y así, por los siglos de los siglos, hasta el último informe PISA.
Es una constante histórica que los mayores de edad se quejen de los menores. Cada generación acentúa unos defectos. Los japoneses medievales se fijaban en cómo los jóvenes degradaban el lenguaje hablado; nosotros, el escrito: con internet y las redes sociales, cometen faltas de ortografía, usan un léxico pobre y no saben redactar. En la Inglaterra del XVII criticaban su dura agresividad; nosotros, su blanda hipersensibilidad.
La cuestión es que no están a nuestra altura. Y es verdad, pero no porque ellos estén más abajo, sino porque nosotros (creemos que) estamos más arriba. Lo mostraron los psicólogos John Protzko y Jonathan Schooler en un artículo en Science. En una serie de experimentos vieron que los adultos consideraban que, en comparación con generaciones anteriores, la juventud de hoy estaba en declive. Pero, curiosamente, ese desprecio hacia los jóvenes dependía de cuáles eran las virtudes que los adultos tenían, o pensaban que tenían. Así, las personas mayores más autoritarias enfatizaba que los jóvenes de hoy no respetan a los mayores; y las más lectoras que los jóvenes de hoy leen menos. Es decir, comparamos a los jóvenes con nuestra mayor fortaleza (yo pongo más atención a su expresión escrita que a sus habilidades matemáticas). Y, sobre todo, cotejamos a la juventud real de hoy con un ser ficticio: la persona que creemos que fuimos. Ese holograma de madurez y sensatez, responsabilidad y amabilidad… que nunca existió.
Pero si, subjetivamente, la juventud de hoy sigue igual, objetivamente, no es así. Están peor. Como muestra Ignacio Conde-Ruiz en La juventud atracada, los jóvenes de hoy lo tienen más difícil que nosotros. Sufren más problemas: precariedad, dificultad para acceder a una vivienda (se van de casa, de media, a los 30,3 años). Y disfrutan de menos poder: en las primeras décadas de la democracia los jóvenes eran más de un tercio del electorado y ahora son un quinto. Sus demandas no se atienden. Nos hemos bebido su elixir y les hemos dejado la eterna juventud.




























 





[ARCHIVO DEL BLOG] Las falacias de los sistemas electorales. [Publicada el 30/09/2015]











No hay sistemas electorales buenos o malos. Todos tienen ventajas e inconvenientes. Si acaso, los hay mejores y peores a la hora de establecer la más exacta correlación entre los votos emitidos y obtenidos por cada candidatura y los escaños atribuidos a cada una de ellas. Pero eso sí, todos están hechos a la medida de los intereses de quienes los promueven.
Entre las manipulaciones más conocidas de un sistema electoral en beneficio propio alcanzó renombre universal el "Gerrymandering". Un término de ciencia política referido a una manipulación de las circunscripciones electorales de un territorio, uniéndolas, dividiéndolas o asociándolas, con el objeto de producir un efecto determinado sobre los resultados electorales y mejorar o empeorar los resultados de un determinado partido político o grupo étnico, lingüístico, religioso o de clase. Era, por tanto, una técnica destinada a quebrar la imparcialidad de un sistema electoral determinado haciendo que el porcentaje de escaños de un distrito no coincidiera con el porcentaje de población del mismo, pues algunos distritos estaban sobrerrepresentados y otros infrarrepresentados.
El término "Gerrymandering" fue una invención periodística con origen en el apellido del gobernador del estado norteamericano de Massachusetts, Elbridge Gerry, que hacia 1812, preocupado porque su partido, el Demócrata-Republicano, no lograba la victoria en los distritos del norte y el oeste del estado, decidió unificar todos esos distritos en uno solo, que de ese modo obtendrían menos escaños en la legislatura.
Unos periodistas de la época, al observabar el nuevo mapa electoral, se percataron de que el distrito así creado tenía la forma de una salamandra a la que pusieron por nombre "Gerry-mander". La caricatura de la salamandra se publicó en el Boston Gazette en marzo de 1812, y representaba a un extraño animal con garras, alas y una cabeza que recuerda a la de un dragón. El término tuvo éxito, pasando a designar cualquier forma de manipulación de los distritos electorales con fines partidistas. Su institucionalización se completó con su inclusión en el Oxford English Dictionary en 1848.
En España el sistema electoral diseñado por la Constitución de 1978 es el proporcional, es decir, aquel en el que la atribución de escaños se produce de manera directamente proporcional a los votos obtenidos por cada candidatura en la circunscripción electoral de que se trate. Eso sí, con correcciones y añadidos como el tamaño poblacional de cada circunscripción, el número de estas y los escaños atribuidos a cada una de ellas, la fijación de un número mínimo de escaños por circunscripción y de votos obtenidos en cada una de ellas o en conjunto de la comunidad autónoma por debajo de las cuales no se atribuyen escaños a las candidaturas. Hay más, pero esas son las principales falacias que distorsionan, a gusto de sus promotores, los resultados electorales en España. Lo explicaba muy bien El País en un reciente artículo titulado De votos a escaños, firmado por Marcos Sanz y Francisco Camas, que pueden leer en el enlace anterior.
Por mi parte, desearía exponer dos ejemplos de distorsión de los resultados electorales, en función del sistema electoral proporcional aplicable, muy recientes en el tiempo: las elecciones al parlamento de Cataluña  del domingo pasado, y las elecciones al parlamento de Canarias, en marzo de este mismo año.
En Cataluña hay cuatro circunscripciones electorales y en Canarias siete, a efectos de elegir a los 130 diputados del parlamento catalán y los 60 del parlamento canario.
Estos son los resultados oficiales de las elecciones al parlamento de Cataluña del domingo pasado, con el número de votos obtenidos por cada lista electoral y el número de escaños atribuidos a la misma, unificados al ámbito regional:
Número total de votos emitidos (Válidos+nulos+en blanco): 4.115.807
Votos y escaños obtenidos por cada candidatura:
Juntos por el Sí: 1.620.973
Escaños: 62
Ciudadanos:  734.910
Escaños: 25
Partido Socialista de Cataluña:  
522.209 
Escaños: 16
Cataluña es Posible:  366.494 
Escaños: 11
Partido Popular:  348.444 
Escaños: 11
CUP:  336.375 
Escaños: 10
Unión Democrática de Cataluña:  102.870 
Escaños: 0
Ahora bien, si se aplicase un sistema electoral proporcional puro, es decir, uno en que la circunscripción electoral fuera la totalidad de la comunidad autónoma de Cataluña y no existiesen barreras de acceso al escaño en función de un número mínimo de votos obtenidos por cada candidatura, sistema este empleado en la elección de los diputados por España en el parlamento europeo, los resultados varían ostensiblemente. La fórmula de cálculo es sencilla: se divide el número total de votos emitidos (4.115.807) por el de escaños (130) y se van atribuyendo escaños a cada lista en función del cociente obtenido de la división anterior (1 escaño por cada 30.487 votos obtenidos) y aplicando los escaños sobrantes según los restos sobrantes (no enteros) de votos de cada lista. El resultado obtenido sería el siguiente:
Juntos por el Sí: 54 escaños
Ciudadanos: 24 escaños
Partido Socialista: 18 escaños
Cataluña es Posible: 12 escaños
Partido Popular: 12 escaños
CUP: 11 escaños
Unión Democrática de Cataluña: 4 escaños
La distorsión de los resultados electorales en las elecciones al parlamento de Canarias de marzo pasado son aún mucho más llamativas. Unificados en el ámbito regional los resultados obtenidos en las elecciones de marzo pasado son estos:
Número total de votos emitidos: 931.876 (Válidos+nulos+en blanco)
Votos y escaños obtenidos por cada candidatura:
Partido Socialista Canario: 182.006 
Escaños: 15
Partido Popular: 170.129 
Escaños: 12
Coalición Canaria-PNC: 164.458 
Escaños: 16
Podemos: 133.044 
Escaños: 7
Nueva Canarias: 93.634 
Escaños: 5
Ciudadanos: 54.375 
Escaños: 0
Unidas: 23.428 
Escaños: 0
Canarias Decide (IU+LV): 20.027 
Escaños: 0
Agrupación Socialista Gomera: 5.090 
Escaños: 3
Agrupación Herreña Independiente: 2.521 
Escaños: 2
Si aplicamos el sistema electoral proporcional puro expuesto más arriba, es decir, uno en que la circunscripción electoral fuera la totalidad de la comunidad autónoma de Canarias y no existiesen barreras de acceso al escaño en función de un número mínimo de votos obtenidos por cada candidatura, los resultados varían ostensiblemente. La fórmula de cálculo es sencilla: se divide el número total de votos emitidos (931.876) por el de escaños (60) y se van atribuyendo escaños a cada lista en función del cociente obtenido de la división anterior (1 escaño por cada 15.531 votos obtenidos) y aplicando los escaños sobrantes según los restos sobrantes (no enteros) de votos de cada lista. El resultado obtenido sería el siguiente: 
Partido Socialista Canario: 13 escaños
Partido Popular: 12 escaños
Coalición Canaria-PNC: 11 escaños
Podemos: 9 escaños
Nueva Canarias: 7 escaños  
Ciudadanos: 4 escaños
Unidas: 2 escaños
Canarias Decide (IU+LV): 2 escaños
Agrupación Socialista Gomera: 0 escaños
Agrupación Herreña Independiente: 0 escaños
Termino. Les recomiendo la lectura de este interesante artículo del profesor de Filosofía del Derecho de la Universidad Pública de Navarra, Jorge Urdánoz Ganuza, titulado Diseño electoral en beneficio propio. Creo que lo encontrarán muy interesante e instructivo. Les propongo un sencillo ejercicio de ingeniería electoral: Busquen los datos de las últimas elecciones al parlamento de su comunidad autónoma (los pueden encontrar en la página electrónica de cada uno de ellos) y trasládenlos a un hipotético sistema electoral proporcional puro, de forma similar a como yo he hecho con los de Cataluña y Canarias. Seguro que se sorprenderán. Y ahora, como decía Sócrates, "Ιωμεν", nos vamos. Sean felices, por favor, a pesar de todo. Tamaragua, amigos. HArendt 










jueves, 28 de diciembre de 2023

Del día de los inocentes

 








Hola, buenos días de nuevo a todos y feliz miércoles. Mi propuesta de lectura para hoy, del cineasta David Trueba, comenta en El País que bromear sobre asuntos muy serios es la gimnasia adecuada, incluso para aquellos que sostienen que ya no se puede hablar de nada con libertad, y que los añorados chistes de gangosos y mariquitas no han muerto por la censura integrista sino por la evolución de la inteligencia, y porque humillar y burlarte del más débil de la clase ya no es la lección que te enseñan en el primer día de cole. Se la recomiendo encarecidamente y espero que junto con las viñetas que la acompañan, en palabras de Hannah Arendt, les ayude a pensar para comprender y a comprender para actuar. Sean felices, por favor, aun contra todo pronóstico. Nos vemos mañana si la diosa Fortuna lo permite. Tamaragua, amigos míos. HArendt. harendt.blogspot.com






El Día de los Inocentes
DAVID TRUEBA
25 DIC 2023 - El País - harendt.blogspot.com

El Día de los Inocentes ya no se celebra con la espontaneidad de antes. Los padres despertaban a los hijos con una falsedad creíble y los hijos se vengaban a lo largo del día. En los medios de comunicación se hacían correr incruentas mentiras. Pero cómo celebrarlo hoy en día si las mentiras son la salsa de la realidad, si lo falso toma el sitio de lo auténtico desde que los propios fabricantes comenzaron a encargar en China réplicas baratas de sus productos para hacer caja en todos los segmentos. Me gusta mucho una celebración catalana del Día de la Radio que consiste en que los locutores de una cadena se intercambian con los de la competencia. Los oyentes experimentan una sorpresa bienhumorada y cordial. Imaginen que al arrancar la mañana, los locutores de una barricada se han pasado a la contraria. Y que avanzado el día, Pedro Sánchez es presidente del partido opositor y Núñez Feijóo ocupa el Gobierno con la misma tenacidad que el anterior no lo suelta, incluido por supuesto el pacto con quien le garantice el poder. Sería menos sorprendente que su equipo de portavoces intercambiaran el sitio, pues estos ya a diario acostumbran a decir una cosa y la contraria en función de las veleidades del rumbo de sus partidos.
Lo que estaría bien es que ese intercambio se extendiera en todos los sectores y por un día y el presidente de la patronal se fuera a hacer camas a un hotel parejero. Y el gremio de grandes empresarios lo dirigiera por unas horas una sirvienta sin contrato. También la valla fronteriza la vigilaría un recién llegado en patera y tendría que saltarla en tres intentos un cuerpo integrado por Marlaska, sus antecesores y los ingenieros que diseñan el foso y las concertinas de nuestros muros disuasorios. Un transexual dirigiría la Conferencia Episcopal y un abusado de niño en un colegio ofrecería una conferencia de apertura de curso para los padres fundadores. El rey Felipe VI podría pasar la jornada en un piso de 12 metros sin calefacción y moverse por su ciudad en el metro en hora punta, mientras que el palacio de la Zarzuela festejaría una jornada de puertas abiertas para los habitantes de la Cañada Real, pues incluso el nombre de su asentamiento es homenaje a la corona. A los directores de periódicos se les concedería el día libre con un paseo por la montaña para que experimentaran en carne propia la fragilidad de los osos, la nobleza del lobo y la poca peligrosidad de las serpientes venenosas.
En ese Día de los Inocentes, a las directivas del Ministerio de Igualdad las mandaríamos a un tribunal de familia para escuchar en qué consiste un divorcio entrampado y a la presidenta de la Comunidad de Madrid a comer en un centro de ancianos la misma papilla infecta en la que se ahorra tres euros por menú. Bromear sobre asuntos muy serios es la gimnasia adecuada, incluso para aquellos que sostienen que ya no se puede hablar de nada con libertad mientras son portada del suplemento dominical y salen en programas de máxima audiencia. Los añorados chistes de gangosos y mariquitas no han muerto por la censura integrista sino por la evolución de la inteligencia, como humillar y burlarte del más débil de la clase ya no es la lección que te enseñan en el primer día de cole.