Mostrando entradas con la etiqueta I.Kant. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta I.Kant. Mostrar todas las entradas

viernes, 31 de julio de 2015

[A vuela pluma] 9 años de Desde el trópico de Cáncer




¡¡¡Gracias por su compañía!!! 



Mañana sábado, 1 de agosto, cumple Desde el trópico de Cáncer nueve años. Nueve años de alegrías y frustraciones, a partes desiguales, eso sí. Alegrías, porque de ninguna otra manera podría definirse lo que uno siente cuando las entradas leídas del blog sobrepasan en este preciso momento las 335.366 (en los últimos cinco años) y los comentarios de los lectores el millar.. Frustración, porque después de 2395 entradas escritas sé que me repito, que resulto cansino en mis argumentaciones, que me falta la frescura de los primeros tiempos. Y también que tengo escasas opciones de remediarlo. Al menos como a mí, mi más severo crítico, me gustaría hacerlo.

En este día de celebración que me emociona compartir con los amigos de Desde el trópico de Cáncer desearía enviar un saludo muy especial a los lectores estadounidenses del mismo. Y es que el contador de entradas leídas registra desde hace más de un año un aumento espectacular de lectores de esa nacionalidad que triplica a los de cualquier otra, incluida la española. 

Como habrán observado, en las últimas semanas he modificado la presentación de las entradas del blog, que ahora lo hacen distribuidas en siete secciones fijas que se alternan aleatoriamente en el día a día y que son, respectivamente: 1. "A vuela pluma": comentarios ligeros sobre algún asunto de actualidad política, social o cultural; 2. "Humor y Digresión": entradas al hilo de las viñetas de mis dibujantes favoritos; 3. "Literatura": textos relacionadas con libros y relatos literarios que, en la medida de lo posible, reproduzco mediante enlaces a los mismos; 4. "Política": con entradas de contenido de opinión política; 5. "Historia": sobre asuntos de esa materia, tan cara para mí; 6. "Pensamiento": entradas un poco más elaboradas de lo normal sobre asuntos que trascienden el tiempo y el espacio, al menos en mi intención; y 7. "Reedición": que como su nombre indica son reelaboraciones en fondo y forma de entradas anteriores del blog. 

No quisiera concluir esta entrada de aniversario sin hacer mención, una vez más, a la intención que movió a su autor al crear Desde el trópico de Cáncer. Intención que no es otra, parafraseando a Karl Popper, que la de demostrar en la medida de sus posibilidades que el papel del pensamiento es el de llevar a cabo las revoluciones por medio de debates críticos más que a través de la violencia y la guerra, siguiendo con ello la tradición del racionalismo occidental de librar las batallas, como dijo Víctor Hugo, con palabras y no con armas. Por eso, Desde el trópico de Cáncer asume sin cortapisas que toda opinión está sujeta a crítica, que hay opiniones más valiosas que otras y que no todas son merecedoras de igual respeto. Respeto que sí merecen, sin ambigüedades de ningún tipo, las personas que las emiten, pues siguiendo a Kant el hombre es siempre un fin en sí mismo, y no un medio para uso de otros.

En todo caso, les reitero que si algo interesante hay en las entradas de Desde el trópico de Cáncer, por subjetiva que resulte esta apreciación, no son los comentarios y opiniones de su autor sino los enlaces, artículos y opiniones de esos "otros" que le sirven de excusa para ellos.

Gracias de todo corazón a todos los amables lectores de Desde el trópico de Cáncer. Ustedes son la principal razón de su continuidad. Mañana es fiesta para este blog y cierra por descanso. Nos vemos el domingo.

Y ahora, como decía Sócrates, "Ιωμεν", nos vamos. Sean felices, por favor. Tamaragua, amigos. HArendt





HArendt




Entrada 2395
elblogdeharendt@gmail.com
La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura (Voltaire)
Todo poder corrompe y el poder absoluto, de forma absoluta (Lord Acton)

viernes, 21 de noviembre de 2014

Dieu et mon droit



http://www.elpais.com/recorte/20080705elpepivin_2/XLCO/Ies/20080705elpepivin_2.jpg





Nicole Muchnik, una conocida escritora y pintora tunecina afincada en España escribió hace un tiempo en El País un artículo muy crítico con la iglesia católica española: "La excepción religiosa española", se titulaba. Y me acordé hoy de él a punto de terminar de releer las casi 800 páginas de "Cristianismo. Esencia e historia" (Trotta, Madrid, 1997), del teólogo suizo Hans Küng. 

Se equivoca quien piense que el fenómeno religioso me resulta ajeno o indiferente; por el contrario, me interesa muchísimo y no para combatirlo, cuestión esa es la que no tengo el menor interés, sino porque me parece un fenómeno relevante en la historia del progreso humano y que debería conocerse y enseñarse en las escuelas, eso sí, desde la objetividad y la total ausencia de dogmatismo. ¿El cese, o jubilación forzosa si lo prefieren así, de monseñor Rouco al frente de la iglesia católica española hará que esta camine por derroteros diferentes a los que caracterizaron su mandato? Espero que sí.   

Esta entrada me va a resultar un poco más larga de lo habitual pero no me queda más remedio que hacerlo así si quiero explicarme. Cuenta Küng en el libro citado más arriba refiriéndose al pensamiento de Immnauel Kant (1724-1804) sobre la existencia o no existencia de Dios, que fue de extrañar que él, el ilustrado por antonomasia, superara al mismo tiempo la Ilustración en sus tres críticas: "Crítica de la razón pura" (1781), "Crítica de la razón práctica" (1788) y "Crítica del juicio" (1790), poniendo límites estrictos a la ingenua omnipotencia de la razón respecto del conocimiento de Dios, pero haciendo lo mismo con la fe ingenua. Es claro, dice Küng, que no son posibles las demostraciones científicas acerca de Dios, sobre la existencia de un Dios que no está en el tiempo ni en el espacio y que por consiguiente no es objeto de contemplación. Las pruebas de Dios según Kant, afirma, no solo han fracasado sino que en modo alguno son teóricamente posibles. Por eso, añade, Kant en la cuestión del conocimiento de Dios apela no a la razón teórica sino a la razón práctica, que se manifiesta en la actuación moral del hombre: Se trata, dice, no solo del ser, sino del deber ser; no solo de ciencia, sino de moral. Dios es, pues, concluye, la condición de la posibilidad de moralidad. Pues lo siento, pero no me convence Kant, al que no he leído en profundidad, ni Küng, al que sí he leído y admiro. Yo no necesito a un Dios eterno para ser un hombre moral

Llevo unos meses dándole vueltas a la idea de matricularme en alguno de los cursos que imparte el Instituto Superior de Teología de Canarias en Las Palmas, pero no acabo de decidirme. Me resulta complicado explicar que puedo sentirme cristiano sin creer en Dios, pero eso es lo mismo que pensaban también la filósofa Simone Weil o el escritor Albert Camus, ambos franceses, por citar solamente dos ejemplos señeros al respecto; ellos creían en un humanismo cristiano, sin necesidad de un Dios, que yo comparto. 

A mí ninguna confesión religiosa me parece un peligro público; ya he superado esa fijación pueril. Respeto su derecho a existir, a organizarse como mejor crea, a adoctrinar a sus fieles y a exponer libremente su "mensaje", si es que lo tiene... Pero sí me molesta que la iglesia católica española goce de privilegios inadmisibles e inentendibles en otros países europeos, salvo acaso la excepción italiana o polaca. Y que no se me diga que el 99,99 por ciento de la población española es católica para justificarlos, primero porque no es verdad, y segundo porque una cosa es haber sido bautizado en una confesión religiosa, y otra muy distinta compartir, aceptar, seguir y cumplir sus preceptos, y no digamos ya considerar que esos preceptos y directrices obligan al conjunto de la sociedad. 

Sin acritud, y con cierta dosis de ironía, diría que lo ideal para mi es que ser católico, evangelista, luterano, testigo de Jehová, musulmán, judío, ortodoxo, ateo, agnóstico, etc., etc., etc., resultara tan irrelevante a efectos sociales para los ajenos a la respectiva fe como ser del Real Madrid, el Barcelona o el Numancia Fútbol Club... Mientras no sea así seguiré siendo escéptico sobre las iglesias y confesiones, sobre "todas ellas", hasta que no demuestren con sus actos que las personas somos, para "todas ellas", más importantes que sus dioses. Y es que remedando el lema nacional de la Gran Bretaña que da título a la entrada a mí lo que me gustaría poder decir es: "Dieu est-il?, oui, mais mon droit aussi" (¿Dios?, sí, pero mi derecho también). 

Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt




Nicole Muchnik




Entrada núm. 2195
elblogdeharendt@gmail.com
"La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura" (Voltaire)

viernes, 14 de diciembre de 2012

Entrevista a Hannah Arendt (I): 1964



Hannah Arendt


El 28 de octubre de 1964 Hannah Arendt concede una entrevista al periodista Günter Gaus que se emitirá dentro del programa "En persona" de la televisión alemana. El vídeo que acompaña esta entrada y la siguiente, recogen en su integridad dicha entrevista, subtitulada en español.

En esta primera entrega, de quince minutos de duración, Hannah Arendt deja desde el primer momento claro su oposición a ser incluida en lo que el entrevistador califica como el "círculo de los filósofos", definiéndose a sí misma como teórica política, y explicando las tensiones y hostilidades que ella percibe entre Filosofía y Política, para pasar enseguida a contestar a las preguntas que la formulan sobre la emancipación femenina o su pertenencia o identidad con el pueblo judío.

También nos habla de su infancia, sus primeras lecturas: Kant, Jaspers, Kierkegaard; su decantación por la Filosofía, la Teología y el Griego; sus estudios con Bultmann, Heidegger y Jaspers.

Y como no, sobre la inflexión que supuso en su vida el año 1933, con el ascenso de los nazis al poder, en el que marcha a París, donde colabora con organizaciones que ayudan a jóvenes judíos a establecerse en Palestina; el nulo papel que jugaron los intelectuales alemanes en su oposición al nazismo; y sobre todo, y ante todo, su necesidad de "comprender", que va a ser el eje central de toda su existencia.

La segunda parte de la entrevista, que comentaré en la siguiente entrada del blog, se centrará en su estancia en los Estados Unidos de América desde mediados de la II Guerra Mundial.

Sean felices, por favor. A pesar del desgobierno que padecemos. Tamaragua, amigos. HArendt









Entrada núm. 1769
http:/harendt.blogspot.com
"Tanto como saber, me agrada dudar" (Dante)
"La verdad es una fruta que conviene cogerse muy madura" (Voltaire)
"La historia del mundo no es un suelo en el que florezca la felicidad. Los tiempos felices son en ella páginas en blanco" (Hegel)